La compañía estadounidense Rocket Lab lanzó con éxito un el cohete especial Electron desde la Isla Norte de Nueva Zelanda, la primera misión realizada desde una plataforma privada.
Electron, de 17 metros de altura y fabricado enteramente de compuestos de carbono, despegó a las 16.20 hora local, desde la península de Mahia, en la costa oriental de la Isla Norte.
«Hemos llegado al espacio. El equipo está encantado», publicó la compañía en un mensaje de Twitter acompañando a imágenes del lanzamiento.
Aunque se trata de un vuelo de prueba, supone un paso importante para un mercado emergente a la hora de abaratar el lanzamiento de cohetes que transporten pequeños satélites y otras cargas, así como abrir el mercado a compañías privadas.
Este es el inicio. El cohete Electron, cuya carga máxima son 225 kilos, está diseñado para portear sólo 150 kilos en la órbita baja terrestre (entre 300 y 500 kilómetros sobre la tierra).
La compañía planea iniciar frecuentes lanzamientos comerciales a finales de este año, cuyo coste por misión se encuentra alrededor de los 5 millones de dólares (4,45 millones de euros).
Rocket Lab, fundada por el neozelandés Peter Beck, eligió el país oceánico para establecer su plataforma de lanzamiento privada debido a que tiene un menor tráfico aéreo en comparación con otras naciones y por su posicionamiento estratégico para poner en órbita satélites de norte a sur alrededor de la tierra. (EFE)