Tras meses de espera, la aplicación Radar COVID ya empieza a rodar entre el territorio de España. Las primeras comunidades autónomas en activar esta aplicación para rastrear los contagios son Andalucía, Cantabria, Aragón y Extremadura.
Cualquier usuario en España puede descargarse e instalarse en su móvil la aplicación de rastreo Radar COVID, pero puede que no funcione. A menos que la comunidad autónoma en la que vive la haya activado, la aplicación sólo sirve para ocupar espacio en la memoria del móvil. Pero esto está empezando a cambiar.
Los primeros pasos de esta aplicación arrancaron en San Sebastián de La Gomera, donde se puso a prueba y se demostró que ayudaba a seguir los contagios por COVID-19 más de cerca. Un apoyo que puede ser fundamental para los rastreadores físicos que escasean en muchas comunidades.
Por ello, la Secretaria de Estado de Digitalización e Inteligencia Artificial que ha formado parte de los trabajos de desarrollo junto con la empresa Indra, asegura que todos los españoles podremos beneficiarnos de esta app a partir del 15 de septiembre, aunque ya se puede activar de forma preliminar desde el 10 de agosto.
La app de Radar COVID-19 se puede descargarse e instalar en cualquier móvil Android y iOS, pero no todos podrán usarla todavía. Las primeras comunidades autónomas incluidas en la lista de compatibles son Andalucía, Cantabria, Aragón y Extremadura. Más adelante se unirán Canarias y Castilla y León. Esto supone que los habitantes de estas comunidades sí recibirán la notificación si han estado cerca de una persona que ha dado positivo, mientras que en los demás la app no estará todavía operativa.
Para ello, las autoridades de cada comunidad deben integrar la aplicación en sus sistemas informáticos sanitarios. Una vez este proceso se ha completado todo es mucho más sencillo. Cualquier persona que dé positivo en una prueba PCR, tenga o no síntomas, puede introducir su resultado voluntariamente en la aplicación para alertar a aquellos que han estado cerca en los últimos días.
La aplicación no recoge datos personales, no registra la ubicación, ni el nombre, ni los datos sanitarios. Sólo hace uso de la conexión Bluetooth para ir conectando con los móviles que tiene cerca y registrarlos con un código para, si fuera necesario, mandar un mensaje a través del sistema de la aplicación, una notificación que avisa de que tu móvil ha estado cerca del móvil de otra persona que está contagiada.
El 15 de septiembre es la fecha clave para que todas las comunidades hayan activado la aplicación, pero estas seis primeras han decidido adelantarse. Será un complemento al trabajo de los rastreadores que siguen siendo muy necesarios para determinar el origen del contagio, el estado del infectado y aconsejar a los afectados para que respeten las medidas de cuarentena y no supongan un riesgo de contagio para otras personas.