La cantante y actriz española naturalizada mexicana Belinda llegó a las pantallas de miles de hogares latinos con la novela “Cómplices al rescate”, en la que interpretó a dos personajes: Silvana y Mariana, dos hermanas gemelas enfrentadas por el talento de una de ellas. Con el tiempo, la artista de 30 años se alejó de las telenovelas y se concentró en su música, llegando a ser considerada “la princesa del pop latino”.
Al margen de su carrera artística, algunos de sus romances se han vuelto públicos, este fue el caso del cantante y compositor mexicano Lupillo Rivera, quien trabajaba como coach en el programa “La Voz” junto a ella. A pesar de que existían rumores de una posible relación entre ambos, la cantante nunca llegó a confirmar el noviazgo, algo que sí a hecho Rivera varios meses después de cortar su vínculo sentimental.
El músico ha asegurado que Belinda “fue una mujer a la que amó locamente”, durante la relación que mantuvieron por cinco meses, desde el 27 de marzo del 2019 hasta el 27 de agosto. “Fue una mujer que realmente quise, una mujer que yo, la verdad, honestamente, le hubiera bajado del cielo las estrellas», aseguró el intérprete al programa Chisme no like.
El cantante agregó que siempre ha hablado en buenos términos de la cantante, debido a que buscó protegerla siempre del ojo público. “Es la mujer más hermosa que he conocido en mi vida», agregó.
EL FAMOSO TATUAJE
Cabe recordar que el pasado 30 de agosto, el cantante publicó un video en su cuenta de Instagram, en el que mostraba un tatuaje del rostro de Belinda que se había realizado en el área interior del brazo.
En el clip, Lupillo negaba haber sido pareja de Belinda y aseguraba que, tras conocerse en “La Voz” solo habían salido juntos en algunas oportunidades. «Belinda y yo nunca hemos sido novios. Belinda y yo simplemente hemos sido amigos», afirmó en aquella oportunidad.
Además, confesó que se tatuó el rostro de Belinda luego de mantener una conversación con ella sobre los fans mexicanos que también graban en su piel la cara de la cantante. «Es mi brazo, es mi cuerpo, yo me puedo tatuar lo que yo quiera. A nadie le debe importar y yo creo que es válido si puedo traer el tatuaje de la mujer más bella, de la mujer más hermosa que he conocido en mi vida. Aquí la traigo y ahí se va a quedar y ahí siempre la voy a tener», contó.