Un sacerdote y al menos 20 personas, que participaban en la misa de mes de un pariente fallecido por la COVID-19, fueron intervenidos por la Policía en el distrito de Chilca, provincia de Huancayo.
Los agentes fueron alertados por los vecinos sobre la reunión social en una vivienda del jirón Mariscal Castilla. Durante la intervención, el sacerdote señaló a la Policía que no estaban haciendo nada incorrecto, porque cumplían con los protocolos de bioseguridad.
«Aquí no estamos exagerando las cosas… Lo hemos hecho en un campo abierto con el distanciamiento social… No estamos aglomerados«, señaló.
Los intervenidos fueron trasladados a la comisaría de Chilca. El sacerdote y otras 13 personas fueron multadas por incumplir las normas sanitarias.
En tanto, Edith Toribio, de 27 años, propietaria del inmueble quedó detenida por el presunto delito contra la salud pública en la modalidad de violación de medidas sanitarias.
Huancayo tiene registrado cerca de 24 mil intervenidos y 12 mil ciudadanos multados por incumplir las medidas sanitarias durante el estado de emergencia.
Sacerdote no está reconocido por el Arzobispado
Hay que indicar que el Arzobispado de Huancayo informó a RPP Noticias que desconoce al sacerdote intervenido por la Policía y que no pertenece a la iglesia. Aclaró que solo el monseñor Pedro Barreto Jimeno oficia misas vía Facebook.