Educar a los hijas e hijas, realizar las tareas del hogar, el trabajo remoto y el cuidado de padres, abuelos y enfermos. Las mujeres peruanas deben hacer malabares para poder encontrar tiempo libre y cumplir con las responsabilidades que históricamente se les asignan, además de su trabajo remunerado. En tiempos de pandemia, cuatro testimonios nos demuestran que es hora de redistribuir los roles y construir espacios más igualitarios, empezando desde casa.Por Luis Trujillano