Ponerle ruido al silencio: Audi explica cómo creó el rugido del E-Tron GT | Motor

Resulta curioso que, por ley, un coche silencioso deba producir algo de ruido a bajas velocidades para alertar a los peatones de su presencia.

Una normativa de la UE obliga a los coches eléctricos a generar algún tipo de ruido cuando circulan a velocidades reducidas para alertar a los peatones y así evitar atropellos u otros incidentes.

El sonido que emiten estos coches se ha convertido en un elemento diferenciador más de modelos exclusivos como es el caso del último superdeportivo 100% eléctrico de Audi.

En un vídeo publicado por la propia marca, sus diseñadores muestran el laborioso proceso de creación de un nuevo sonido que inspire la presencia y las sensaciones que transmite un superdeportivo, pero sin perder su carácter moderno e innovador.

Tal y como sus ingenieros contaron a nuestros compañeros de AutoBild, el desarrollo del ruido que acompañará al Audi e-Tron GT supuso todo un reto para el departamento que la marca ha creado específicamente para ese fin.

Audi creó el sonido a partir de 32 elementos distintos utilizando un software personalizado y algún desarrollo propio bastante ingenioso.

La base para la creación del sonido del nuevo superdeportivo eléctrico de Audi fue un tubo de plástico de casi tres metros de longitud con un ventilador instalado en un extremo. Al pasar el aire a alta velocidad por el largo tubo producía un rugido agresivo y contenido que se adapta a la naturaleza deportiva del E-Tron GT.


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Stephan Gsell, uno de los ingenieros al cargo de este laboratorio de sonidos de la compañía, ha reconocido el desafío que ha supuesto encontrar un sonido que transmitiera la potencia de un automóvil de estas características, pero también algo con lo que pudieras vivir todos los días.

El resultado es un sonido equilibrado que no evoca a una película de ciencia ficción, pero tampoco es un simple intento de recrear un motor de gasolina con su rugido convencional.

El sonido es, a partes iguales, un requisito legal para alertar a los peatones, así como un estímulo para las personas que podrían no sentirse cómodas sin el sonido del motor de un superdeportivo rugiendo bajo el capó.

Por ello, el sonido del «motor» es opcional en el interior y se puede elegir la intensidad con la que se escucha en el interior del habitáculo o apagarlo por completo y que solo esté disponible para que lo escuchen los peatones al circular por ciudad.

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