Los bancos buscan nuevas formas de reforzar la seguridad de sus tarjetas de crédito y adaptarlas a los nuevos tiempos. Aqua es una tarjeta pensada para proteger las compras online.
Las compras a través de internet han crecido este último año impulsadas por las medidas de distanciamiento social necesarias para frenar la pandemia. Al mismo tiempo, los fraudes online crecen, por lo que se requieren nuevos métodos de protección para los consumidores.
BBVA ha lanzado Aqua, una nueva tarjeta de crédito diseñada para reforzar la seguridad de las compras online. Su mayor peculiaridad reside en no tener ningún dato impreso, salvo el nombre de su propietario. Toda esta información se oculta en una aplicación en el móvil.
Cada vez es más frecuente que los clientes lleven las aplicaciones de su banco en el móvil y que realicen compras en tiendas online. Para formalizar un pago, es necesario rellenar un formulario con los datos de la tarjeta como la numeración PAN, la fecha de caducidad y el CVV.
Si perdemos la tarjeta o nos la roban, esos datos quedarían expuestos para que los delincuentes pudieran hacer pagos online en nuestro nombre, de ahí que BBVA proponga ocultarlos. Con Aqua, a la hora de realizar pagos online, será necesario entrar en la aplicación para consultar la información de la tarjeta.
En el móvil se encuentran el número PAN y la fecha de caducidad, además del CVV que cambiará cada cinco minutos. La entidad bancaria ha decidido apostar por algoritmos criptográficos para generar cada poco tiempo un CVV nuevo y así dificultar más la tarea de los ciberdelincuentes. Si pagar por internet hasta ahora implicaba tener la tarjeta en una mano, con este nuevo método pasamos a depender del móvil, el cual puede también ser hackeado, ya lo dicen los expertos de ciberseguridad, no existen métodos 100% fiables frente a los atacantes.
No obstante, Aqua trata de dificultar el acceso de esos atacantes. Si el usuario entra en una web falsa creyendo que es una tienda segura y da sus datos para pagar por un producto, normalmente los piratas informáticos podrían usar esa información, pero con Aqua, el CVV sería siempre distinto e impediría que usaran la cuenta bancaria sin el consentimiento de su propietario.
Estas medidas, en principio, reforzarán la seguridad de estas transacciones y se sumarían a otros mecanismos como la autentificación en dos pasos. Además, desde la aplicación sería posible anular la tarjeta rápidamente si ha sido robada.
Aqua sería un nuevo producto para los clientes más adaptados a las nuevas tecnologías. Estará disponible en España a finales de este mes en formato de débito, crédito y prepago. Será también compatible con todos los servicios de pago para móviles con los que opera BBVA (Apple Pay, Samsung Pay y Google Pay)