Lo ideal sería no apartar la mirada de la carretera, pero todos cometemos alguna de estas distracciones de vez en cuando.
Las distracciones son la principal causa de accidente en nuestras carreteras, algo que debería ser suficiente como para que todos los conductores se centren en lo que están haciendo una vez se ponen a los mandos de su vehículo. Pero, como no es así, la DGT recuerda cuatro de las distracciones más frecuentes al volante.
Ni para buscar tu emisora favorita📻o la calle a la que vas🗺️; ni para coger las gafas del bolso🕶️. Y mucho menos para ver el último wasap que acaba de entrar📵
¡No apartes los ojos de la carretera! Aunque puedes pestañear, eso sí…😸😀#FelizMartes #DGTeros#CeroDistracción pic.twitter.com/RASVVfKlBk
— Dir. Gral. Tráfico (@DGTes) October 6, 2020
Alguna de ellas, como no mirar el móvil, ya no solo para mirar un Whatsapp si no para cualquier otra cosa, es algo que ha quedado claro en más de una ocasión y que todo el mundo debería saber, pero hay otras que muchos hacemos de manera inconsciente y que también pueden suponer cierto peligro.
Teniendo en cuenta que la atención tiene que estar siempre en lo que ocurre en la carretera, todo lo que haga que se desvíe de ahí, entraña cierto riesgo. En el caso de consultar el navegador, dudamos que alguien no sea consciente de que ponerse a introducir una dirección en marcha no es para nada recomendable; pero por ejemplo, utilizar la radio para cambiar de emisora es algo que tenemos automatizado y que, aunque no nos demos cuenta, si que requiere parte de nuestra atención, sobre todo si se controla a través de pantallas táctiles.
Por último, interactuar con cualquier objeto que tengamos en el asiento del copiloto o en los huecos de las puertas también nos puede poner en riesgo ya que, por un lado, requiere cierta atención y, por otro, nos obliga a utilizar las manos e incluso a mirar para buscar lo que necesitamos, haciendo que durante unos segundos no percibamos qué ocurre en la carretera.
Este artículo fue publicado en Autobild por Mario Herráez.