Investigadores han conseguido fabricar una serie de robots colaborativos que no solo son capaces de completar un lienzo utilizando multitud de colores, sino también compenetrarse entre sí para crear mezclas únicas de colores secundarios.
Los robots colaboradores, en su mayoría de muy pequeño tamaño, se están popularizando durante los últimos años y si bien la mayoría han estado enfocados a tareas de rescate, los que te ofrecemos ahora son ante todo creativos.
Ahora un equipo del Instituto de Tecnología de Georgia ha sido capaz de crear un sistema experimental compuesto de minúsculos robots que pueden acabar pintando cualquier lienzo y bajo una serie de patrones y colores previamente dictados por el artista.
El artista puede transmitir los datos a un grupo de pequeños robots que llevan como una especie de ruedas, y que cada uno de los cuales es consciente de su ubicación en el lienzo pero también saben la situación del resto de los robots para que jamás se choquen entre sí. Los robots se pueden comunicar de forma inalámbrica entre sí, y el dispositivo que envía la orden puede determinar qué robots deben pintar qué áreas determinadas para hacer así el trabajo de forma eficiente.
Los robots actuales tienen un proceso de pintado que se simula proyectando rastro de color detrás de cada robot. En todo caso los investigadores planean equipar a los robots con cartuchos de colores primarios que se puedan mezclar según sea necesario, creando al mismo tiempo combinaciones espectaculares de colores.
Una de las particularidades de estos robots colaborativos es que si uno no puede generar un color por sí solo, puede comunicarse con cualquier otro compañero para mezclar los colores.
“El equipo de múltiples robots se pueden considerar como un pincel activo para que el artista humano pinte, y los robots individuales se mueven sobre el lienzo de acuerdo con las especificaciones de color proporcionadas por el artista”, señalan en la presentación del invento.
[Vía: Newatlas]