Powerchute es un revolucionario cargador de pilas sencillo de usar, cómodo y seguro: hasta un niño puede utilizarlo. Solo hay que soltar la pila en un tubo… y listo…
Aunque poco a poco las clásicas pilas están siendo sustituidas por las baterías recargables, aún se usan miles de millones en todo el mundo. Y la mayoría son de un solo uso: menos del 10% de las pilas que se utilizan en el Reino Unido son recargables.
Hay que reconocer que los cargadores de pilas tampoco ayudan demasiado. Abultan mucho en los enchufes, solo tienen capacidad para 2 o 4 unidades, y las pilas son difíciles de colocar: tienen que estar en la dirección correcta, y hay que empujar con fuerza o tirar para extraerlas. Muchas veces por la pereza de poner las pilas a cargar o por su limitada carga simultánea, necesitamos una y nos damos cuenta de que todas están descargadas.
Por eso Powerchute nos ha llamado la atención. Literalmente, podrás recargar pilas por un tubo. Es un original cargador extremadamente sencillo de usar, y muy efectivo. Puedes ver cómo funciona en este vídeo:
Con Powerchute solamente tienes que soltar una pila vacía en la parte superior de la tubería. Da igual que esté en una dirección o en otra, o que sea una pila AA o AAA. Se deslizará hasta el cargador situado en la parte central, y automáticamente se recargará cuando llegue su turno.
El cargador puede detectar si una pila ya está muy usada y no recarga correctamente. En ese caso la soltará por la rampa izquierda.
Las pilas completamente cargadas las sueltan en dos rampas adicionales, una para las pilas AA, y otra para las AAA. Así que solo tienes que soltar la pila descargada, y recogerla de la bandeja correspondiente cuando esté cargada. Cómodo, sencillo, y divertido.
Powerchute es tan seguro y fácil de usar que es ideal para que los niños recarguen las pilas de los gamepad de las consolas, o los mandos de la tele.
Este original cargador busca financiación en Indiegogo. Está disponible con un 33% de descuento con respecto a su precio cuando salga a la venta, y solo cuesta 23 libras. Al cambio, unos 25 euros. ¡Incluso más barato que los cargadores convencionales!