Los expertos coinciden: no limpiamos el microondas lo suficiente, y esto puede tener graves consecuencias. Esta es la frecuencia adecuada para evitar la acumulación de gérmenes y posibles daños en el electrodoméstico.
El microondas es uno de los electrodomésticos que más utilizamos en nuestra cocina. Arrancamos la mañana calentando leche o café, a mediodía lo usamos para calentar la comida, por la tarde se encarga de hacernos unas palomitas, más tarde descongelamos los ingredientes para la cena que hemos olvidado sacar del congelador, y antes de dormir nos calienta el agua para tomar una infusión.
Con todo el uso que le damos, es normal que se ensucie, incluso aunque seamos muy cuidadosos y tapemos los platos y los vasos para evitar salpicaduras. Tanto es así que, según los expertos en limpieza, el microondas es uno de los principales elementos de la cocina que no limpiamos lo suficiente.
Mark McAuley, experto en limpieza de la empresa australiana Ballarat Cleaning Specialists, explica que prestar atención a la higiene del microondas es mucho más importante de lo que pensamos. Según él, hay tres razones principales para limpiar este electrodoméstico con la frecuencia necesaria: el vapor, las salpicaduras de alimentos y la contaminación cruzada.
«Al calentar la comida, el microondas extrae vapor. Este vapor formará condensación y se asentará en las superficies internas del microondas. El agua que se deja reposar a temperatura ambiente fomentará el crecimiento de moho y bacterias», apunta.
A medida que va pasando el tiempo, estos gérmenes van aumentando debido a la acumulación de salpicaduras de comida en el interior del microondas, y pueden transferirse a la comida que estás calentando. «Esto creará un ambiente de contaminación cruzada», afirma McAuley.
Pero los gérmenes no son el único problema. No limpiar tu microondas lo suficiente también puede provocar mal funcionamiento y averías. Los restos de comida hacen que el electrodoméstico consuma más potencia, y también pueden provocar que se sobrecaliente y se estropee.
«Con el tiempo, la mugre se acumula y el microondas consume cada vez más», explica Abe Navas, un experto de la empresa de limpieza del hogar Emily’s Maids. «Entonces crees que tu microondas está roto y subes la potencia, y esto se convierte en un ciclo sin fin. Finalmente, tu máquina se sobrecalienta y se rompe».
Para evitar todos estos problemas, limpia tu microondas a conciencia al menos una vez a la semana. Además, procura limpiar las salpicaduras en el momento en el que se produzcan, ya que al estar blandas se podrán quitar mejor.