El mercado de vehículos usados ha caído un 16,6% en febrero en comparación con 2020, aunque no todo es negativo.
La semana arrancó con el balance de las ventas de coches nuevos que, un mes más, volvió a dibujar una caída: esta vez del 38,4%. Una tendencia que se hace extensible al mercado de segunda mano. Tal y como informa Faconauto, el mercado de vehículos usados ha caído un 16,6% en febrero en comparación con las cifras registradas en el mismo periodo de 2020.
En total se han registrado 143.828 transferencias, que, en su mayoría, corresponden a vehículos que tienen, como máximo, cinco años. Son estos los únicos que han registrado subidas: los coches que tienen entre 1 y 2 años han aumentado un 27%, los de 2 a 3 años lo han hecho un 4,5% y los de 3 a 5 años han subido un 5,5%.
Estos resultados invitan a vislumbrar una ligera recuperación del mercado. En este sentido, los modelos usados que tienen menos de cinco años mantienen el interés y siguen contribuyendo a la renovación del parque automovilístico. En el otro lado de la balanza, sin embargo, nos encontramos con los vehículos de 6 a 10 años que han bajado un 12,6% y los de más de 10 años, que lo han hecho en un 17%.
El renting coge impulso
Si analizamos el mercado de segunda mano por canales sólo hay que ha crecido: el renting, cuyas ventas han subido un 22,3%. Las bajadas más agudas se han registrado en el ‘rent a car’ (45,6%) y en las matriculaciones tácticas (28,2%). El canal de particulares ha caído en un 16,7%, las importaciones en un 15,7% y la compraventa en un 15,6%. Los concesionarios, por su parte, han tenido una cuota de más del 20% y sus operaciones sólo han retrocedido un 8,9%.
Al dividir el mercado por carburantes, observamos que febrero ha seguido la misma tendencia de los últimos meses: los vehículos de gasolina han caído un 19,2% y los diésel, un 17%. Los eléctricos, los híbridos con un crecimiento del 124,4% y los híbridos enchufables (con un aumento del 426% en el caso de los modelos que combinan un motor diésel y uno eléctrico y un 145,5% en los que hacen lo propio con un propulsor de gasolina) continúan aumentando sus ventas.
La causa
Faconauto pone sobre la mesa una razón que explica por qué el mercado continúa en la misma línea de los últimos meses: la situación sanitaria. Aunque ha mejorado y cae menos que el mercado de coches nuevos, la incertidumbre generada por el coronavirus todavía sigue afectando a los compradores que necesitan cierta estabilidad para coger impulso. La previsión es que empiece a crecer, previsiblemente, en el segundo trimestre con un contexto sanitario más certero.
Este artículo fue publicado en Autobild por Elena Sanz Bartolomé.