Xiaomi Mi 11 Lite, toma de contacto y primeras impresiones del modelo 4G | Tecnología

Xiaomi sigue inundando el mercado con nuevos dispositivos y ayer anunció cuatro integrantes, si no contamos versiones especiales o versiones 4G/5G de la familia Mi 11. Al analizar el Mi 11 nos encontramos con un teléfono de lo más redondo, pero estaba claro que no se iba a quedar solo por mucho tiempo y ya tenemos entre manos el Mi 11 Lite.

Se trata del hermano pequeño que comparte esa apariencia premium con materiales como el cristal o una pantalla que aprovecha muy bien el frontal sin recurrir a los bordes curvos, pero que destaca por un grosor y un peso de lo más contenido, siendo el terminal ‘Mi’ más ligero y delgado hasta la fecha.

Llevamos unos días con el Mi 11 Lite y os contamos nuestras impresiones en esta toma de contacto que sirve para que vayáis conociendo el terminal hasta que pasemos más días con él y os contemos todo en el análisis. Y sí, es un móvil que sorprende, pero que en algunos aspectos se puede quedar corto.

Primeras impresiones del Xiaomi Mi 11 Lite por apartados:

Un espectacular grosor de menos de 7 mm que pasan factura a la batería

Xiaomi ha ido puliendo el diseño de sus dispositivos cada vez más, sobre todo en lo que se refiere a la gama alta. Sin embargo, y aunque con el Mi 10 Lite dieron un salto en cuanto a calidad de materiales, al sostenerlo entre manos la sensación era que estábamos ante un móvil más barato y que hacía concesiones para competir contra los Redmi y realme.

Parece que han cambiado la estrategia y sí, el precio es muy competitivo y, aunque hay concesiones en cuanto a batería y procesador, la compañía china ha apostado por un diseño diferenciador para este modelo Lite.

Es un móvil que sorprende desde el unboxing, ya que enseguida notamos que el grosor y el peso están muy por debajo de lo que solemos tener entre manos. De hecho, si tenemos en cuenta su tamaño de 160,5 mm de alto y los 75,7 mm de ancho, los 156 gramos de peso son más impresionantes.

Eso se traduce en un móvil realmente cómodo en el bolsillo y, además, el grosor también destaca gracias a sus 6,8 mm si no contamos el módulo de cámara. Es realmente impresionante y, de hecho, el móvil más delgadito que hemos analizado en muchísimo tiempo. 

La parte delantera cuenta con una pantalla que ocupa el 85,3% del frontal, el orificio en la parte superior izquierda (con un diámetro mayor que el visto en el Redmi Note 10 Pro o en el Mi 11) y unos marcos que son casi simétricos y muy contenidos: 1,88 mm en los laterales y en la parte superior y 2,75 mm en la barbilla.

Es una muy buena sensación de frente y la pantalla es plana, pero si damos la vuelta al terminal tenemos un módulo de cámara que toma prestado el diseño del del Mi 11 (pro fin casi todos los Mi 11 son reconocibles por el módulo de cámara, no como los Mi 10) y un acabado de cristal plano que es brillante en el color que nos ha tocado… y ciertamente sucio.

Las huellas se quedan con facilidad, con mucha facilidad, pero bueno, tenemos una funda de silicona en la caja que protege y evita que guarreemos tanto el teléfono.

La botonera está en el lateral derecho, con el sensor de huellas capacitivo y en la parte inferior tenemos uno de los altavoces, el USB-C, un micrófono y el módulo de SIM que es DualSIM o SIM 4G + microSD. En la parte superior solo tenemos un emisor infrarrojo y el lateral izquierdo está totalmente despejado.

Con un grosor tan escaso, la afectada es la batería. Tenemos entre manos 4.250 mAh que pueden quedarse cortos en el día a día de un usuario muy exigente, sobre todo si usamos los 90 Hz. 

Hay diferentes modos de ahorro de energía y acciones que podemos hacer para aumentar la autonomía, como activar el modo noche o poner el refresco a 60 Hz, pero nos da la sensación de que se va a quedar corta.

Debemos hacer más pruebas, pero en el test sintético con el brillo al máximo tenemos una autonomía de 6 horas 46 minutos. Es cierto que el brillo es elevado, pero no deja de ser una cifra bastante modesta.

La carga se realiza con el cargador de 33 W incluido en la caja y, sinceramente, pensaba que iba a cargar en menos tiempo.

En las primeras pruebas de carga, los resultados son de una carga del 50% en 26 minutos y del 100% en 65 minutos. No deja de ser una hora y un poquito, pero teniendo en cuenta que tenemos 4.250 mAh, pensaba que bajaríamos de los 60 minutos.

El «problema» es que tenemos una carga muy lineal hasta prácticamente el 90% y, una vez llega a esa cifra, empieza a ir más lento, imaginamos que como medida de control de batería para cuidarla un poco.

La pantalla del Mi 11 Lite no sorprende cuando hemos visto móviles como el Redmi Note 10 Pro que ya tienen ese panel AMOLED a 120 Hz, pero no por eso es una mala pantalla, en absoluto. 

Tenemos una pantalla plana que cuenta con resolución de 2.400 x 1.080 píxeles y que, además, es AMOLED, y un buen panel de Samsung, de hecho. Tiene unos colores vibrantes, modo Always-on Display y me ha sorprendido el nivel de brillo, de 1297 Lux de máximo en el modo de altos brillos en nuestras pruebas.

Se va a ver perfectamente a plena luz del día, y ese es un punto muy importante. Los ángulos de visión también son buenos, aunque a partir de los 45º nos ha parecido que la pantalla se tiñe de un tono más cálido y tiene un refresco de 90 Hz.

Vale, no son los 120 Hz del Redmi o del Mi 11 ‘estándar’, pero hay dos puntos importantes en esto. El primero es que 90 Hz ya supone un salto importante en experiencia de navegación respecto a los 60 Hz, algo que se nota en el scroll en apps y en juegos.

El segundo punto es que con 120 Hz, el móvil consumiría mucha más batería y, como hemos dicho, no va sobrado, precisamente… así que me parece bien ese equilibrio entre los 4.250 mAh, una pantalla con buen nivel de brillo y esos 90 Hz.

En el terreno del sonido, lo cierto es que es un móvil que sorprende tanto por su alto volumen como por su contundencia con los graves. 

No chirría cuando subimos el volumen, tiene unos graves que llaman la atención si tenemos en cuenta el escaso grosor del móvil y, aunque el altavoz inferior es algo más potente que el superior, lo cierto es que la sensación estéreo está muy lograda.

Para ver series, vídeos de YouTube y jugar, lo cierto es que estamos ante un muy buen móvil en lo que a multimedia se refiere gracias tanto al sonido como a la buena pantalla.

Un Snapdragon 732G en su versión 4G que cumple en el día a día

En el interior vemos una propuesta que ya tuvimos en el Redmi Note 10 Pro y que demuestra que la estrategia de Xiaomi con este Mi 11 Lite y la de Poco con sus nuevos terminales es totalmente distinta.

Mientras Poco apuesta por la potencia bruta en sus nuevos X3 Pro y F3, Xiaomi invierte más en diseño y acabados en esta ocasión, pero eso no significa que tengamos una ‘piedra’ en el interior. Como SoC está el Snapdragon 732G, un sistema más que solvente en el día a día, pero que no da un salto respecto a lo que ya teníamos en la gama media de Xiaomi.

Está acompañado por 8 GB de RAM en nuestro modelo y este es el resultado de las pruebas sintéticas:

Solo hemos podido pasar AnTuTu y PC Mark porque en los últimos dispositivos de la casa china hemos tenido problemas con otros test convencionales como Geekbench o 3D Mark. Veremos si de cara al análisis del Mi 11 Lite nos dejan instalar algunos más, pero como siempre decimos, no dejan de ser números y lo que importa es el rendimiento en el día a día.

Eso en la versión 4G, claro, ya que la versión 5G, algo más cara, cuenta con el Snapdragon 780G, un nuevo chip que parece bastante más emocionante que el que tenemos entre manos en este momento.

Eso sí, en aplicaciones del día a día como redes sociales, correo y juegos, el SD732G sigue rindiendo de maravilla. La disipación térmica es uno de los puntos fuertes del móvil, curiosamente pese a su tamaño, y solo he tenido problemas de rendimiento en juegos como Genshin Impact y Fortnite, dos de los más exigentes.

La velocidad de la memoria no está a la altura de la de su hermano mayor y, de hecho, parece el mismo módulo de 128 GB que monta el Poco X3 NFC y el Redmi Note 10 Pro.

Ahora bien, el problema en los últimos Xiaomi que hemos analizado no estaba tanto en el hardware como en el software. MIUI 12 ha venido poco optimizado en los últimos móviles de Xiaomi, Redmi y Poco y eso es algo que pasa factura en el día a día.

Dentro de las aplicaciones van muy bien, pero el sistema se notaba con algo de retardo en algunas acciones. Hay que esperar al análisis, ya que tendremos oportunidad de probar todo más a fondo, pero lo cierto es que el MIUI 12.0.3 que tenemos entre manos en esta ocasión va algo más rápido, o eso he notado.

Puede que el contar con otros teléfonos con este SoC y esta versión del sistema haya hecho que Xiaomi trabaje un poco más en la optimización, o puede ser simplemente que hayan pulido más MIUI 12, pero lo cierto es que es mi impresión en esta toma de contacto.

Sobre el desbloqueo, tenemos un desbloqueo por foto que es rapidísimo, así como un desbloqueo por huella en el lateral que es inmediato. 

El desbloqueo por foto se puede configurar para que pase a la pantalla principal del móvil automáticamente o dejar el gesto de deslizar y sí, necesita luz ambiental para funcionar, pero es muy, muy rápido.

Reciclando un curioso telemacro con cámaras que destacan en exteriores

El módulo de cámaras es idéntico al del Mi 11 y, de hecho, tenemos los mismos tres sensores, aunque cambiando los megapíxeles. Esto no es lo más importante, ya que sí, los 108 Mpx están bien en ciertas ocasiones, pero con 64 Mpx, y con bastantes menos, se pueden hacer fotografías espectaculares en modo auto, que es el que terminamos usando.

Como el sensor es más pequeño, las lentes también y el módulo de cámara principal no sobresale del resto, lo que es una buena noticia y ayuda a mantener ese discreto grosor. 

Si pasamos al detalle de cada lente, tenemos un telemacro que me sigue sorprendiendo. Es el mismo telemacro del Mi 11 y del Redmi Note 10 Pro, lo que se traduce en un 2x de 5 megapíxeles con apertura f/2.4 que tiene una distancia de enfoque máxima muy limitada y que permite capturar, con buena luz, imágenes de lo más interesantes:

Algo que me encanta del telemacro es la profundidad de campo tan atractiva que ‘dibuja’, algo espectacular si salimos a hacer fotos a flores.

Si pasamos al principal, tenemos esos 64 megapíxeles en el sensor con un sensor que no es el más grande del mercado, 1/1,97″ y con un tamaño de píxel que tampoco es muy generoso, 0,7 micras. La apertura es f/1.8 y la lente está compuesta por seis lentes.

Las fotografías, con buena luz, me han parecido muy buenas, con un buen rango cromático y en exteriores lo cierto es que las altas luces y las sombras se portan muy bien en modo automático. En interior y de noche… la cosa cambia.

El ruido no es demasiado evidente a simple vista, pero sí se notan unos colores y texturas más lavadas que no son agradables.

Hay que seguir haciendo más pruebas, desde luego, pero no nos ha entusiasmado el resultado de noche debido a esas texturas más difuminadas. 

El gran angular, por su parte, son 8 megapíxeles f/2.2 y es el clásico que solemos encontrar en estos dispositivos, pero me alegra ver que, parece, el móvil tiene corrección de aberración cromática en el software y, aunque hay algo de efecto de barril, no es muy exagerado.

De cara al análisis del Xiaomi Mi 11 Lite os mostraremos más ejemplos, vídeos y fotos con la frontal, pero de momento esta es una buena muestra de lo que podemos hacer con este triplete de cámaras.

Un diseño que brilla entre las manos y una gran pantalla para consumir contenido

Salen competidores en la gama media por parte de grandes grupos como BBK, pero Xiaomi sigue con su estrategia de ofrecer un terminal para cada usuario.

Es cierto que POCO y Redmi son «externas», pero en la práctica son de la familia de Xiaomi y si contamos el X3 Pro, el Redmi Note 10 Pro y este Mi 11 Lite, tenemos móviles que se parecen en bastantes cosas y que llegan a compartir precio, prácticamente, pero que son para usuarios muy distintos.

La pregunta es… ¿qué quieres por menos de 300 euros? Si es potencia, el Poco X3 Pro es para ti. Si es una pantalla espectacular, el Redmi Note 10 Pro y si quieres un diseño rompedor, ahí es donde entra el mi 11 Lite.

Es un móvil con muy buen panel y buen rendimiento y parece que MIUI 12, por fin, se ha puesto las pilas en optimización, pero el verdadero punto fuerte del terminal es un diseño que llama la atención. Si lo que buscáis es una pantalla grande, pero queréis un móvil finito y que pese poco, este es para vosotros.

Ya veremos en el análisis completo qué tal aguantamos la semana con los 4.250 mAh y cómo se portan las cámaras en más situaciones, pero desde luego, es un móvil que entra por los ojos y que resulta muy cómodo entre manos.