Científicos australianos consideran improbable que puedan cumplirse las estimaciones de temperatura impuestas en el Acuerdo de París de 2015.
Un nuevo informe, nada halagüeño, llega a la conclusión de que las temperaturas globales superarán los 1,5 °C en la próxima década, lo que podría provocar desastres naturales.
El Consejo Climático de Australia publicó este informe el pasado jueves. Se trata de una organización independiente de científicos climáticos y expertos en salud, pero también en energía renovables y políticas que trabajan para informar sobre la crisis climática.
“La ciencia nos dice que el aumento de la temperatura media global probablemente superará los 1,5 °C durante la década de 2030, y que la estabilización a largo plazo del calentamiento a 1,5 °C o menos será un desafío enorme”, señalan el Dr. Kevin Trenberth del Centro Nacional de Investigación Atmosférica y el profesor Christopher Field, del Instituto Stanford Woods para el Medio Ambiente.
Si bien el informe está dirigido a que el Parlamento australiano tome medidas, sí que recoge datos de índole general. En concreto, en el informe se pide que Australia reduzca las emisiones en un 75 por ciento para 2030 y alcance cero neto para 2035 para lograr los objetivos a largo plazo del Acuerdo de París , lo que significa limitar el calentamiento a muy por debajo de 2ºC.
«Que se logre el cero neto para 2050 es al menos una década demasiado tarde y conlleva un fuerte riesgo de alteración climática global irreversible a niveles incompatibles con el mantenimiento de sociedades humanas que funcionen bien”, han escrito los autores de este informe.
En el informe, repiten en varias ocasiones, es probable que las temperaturas globales superen los 1,5 °C en la década de 2030 en función de los aumentos de temperatura existentes durante estos últimos años. No es nada descabellado el informe, en vista de que año tras año, se vienen superando temperaturas récord durante los meses de junio y julio.
En todo caso, afirman, “que no es todavía demasiado tarde”, y que limitar cualquier décima de temperatura durante el presente siglo, va a marcar mucho la diferencia. “Cada décima de grado realmente importa: 1,8 ° C es mejor que 1,9 ° C y es mucho mejor que 2 ° C«.
Cabe aclarar, que el Acuerdo de París de 2015 busca limitar las temperaturas globales a un máximo de 1,5 °C sobre los niveles preindustriales, y en este informe se asegura que podrían sobrepasarse incluso ya durante la próxima década, lo que sería, sin duda, una mala noticia.