MediaTek podría ser la primera en presentar un procesador construido a escala de 4 nanómetros. Pero para ver esto en dispositivos móviles tendremos que esperar hasta principios del año que viene.
Los procesadores móviles no han dejado de evolucionar a lo largo de los años. En la actualidad nos encontramos con procesadores cuya potencia y eficiencia energética dejan en evidencia a aquellos de hace cinco años. Todo esto gracias a la carrera por construir procesadores con una litografía que permite que los transistores que los componen sean minúsculos.
Estos transistores son las unidades básicas de procesamiento, se encargan de realizar los cálculos necesarios para que todo funcione. Están construidos a una escala muy pequeña llamada nanómetro, vendría siendo la millonésima parte de un milímetro. Lo que implica es que cuanto más bajo sea el número, estos transistores serán más pequeños y la cantidad de ellos será mayor dentro del procesador.
A mayor cantidad de transistores, mayor potencia bruta y mejor control energético. Todo parecen ventajas, pero en realidad no es así. Construir procesadores con transistores tan pequeños es una tarea compleja y a la que se enfrentan muchos fabricantes como Samsung, Huawei, Qualcomm, NVIDIA y TSMC entre otras.
Ahora mismo nos encontramos en una situación complicada, estamos en plena crisis de chips porque empresas matrices como TSMC no consiguen dar abasto a la producción de procesadores. Pero entre todas estas complicaciones hay una empresa que parece haberse asegurado ser la primera en conseguir procesador de 4 nanómetros.
Esta empresa es MediaTek y según varias fuentes, habría conseguido un trato con TSMC con el cual se vería provista de estos procesadores. Eso sí, el coste habría sido reseñable. Los procesadores le costarían cerca de 80 dólares por unidad en comparación a los 35 dólares de los procesadores de 5 nanómetros.
Aunque ya se hable de estos procesadores, habría que esperar al menos hasta el cuarto trimestre de este año o principios del año que viene para que empiece la producción. Todo esto significa que, en principio, no competiría con los terminales que montan el Snapdragon 888.
Sería interesante ver si el rendimiento consigue alcanzar de una vez por todas a los procesadores de Qualcomm, porque MediaTek lleva una larga lista de derrotas en cuanto a rendimiento y eficiencia energética. Ni si quiera sus procesadores Dimensity 1200, que tanto prometían, consiguieron el éxito esperado.