La industria del software también puede contribuir a reducir la huella de carbono de nuestros dispositivos, nace el código verde.
Las principales empresas de servicios en la nube buscan reducir la huella de carbono de sus gigantes centros de datos aligerando sus códigos, entre otras medidas. Estas medidas a gran escala se puede aplicar en aparatos de menor tamaño como nuestros móviles y ordenadores.
Los lenguajes de programación y códigos utilizados para cada aplicación o programa influyen directamente en la cantidad de energía que consumen los dispositivos y, por lo tanto, son responsables de un consumo poco respetuoso con el medio ambiente. En esa búsqueda por un código más ecológico y eficiente nace The Green Software Foundation.
Microsoft, junto a Accenture, ThoughtWorks, la Fundación Linux y GitHub han impulsado este proyecto que perseguirá la creación de códigos más ligeros y cumplir con las reducciones de carbono acordadas en el Acuerdo Climático de París con el que EEUU se ha vuelto a comprometer. Así lo han anunciado en la conferencia de desarrolladores Build 2021de Microsoft.
Guido van Rossum, creador de Python que ahora forma parte de Microsoft, ha puesto este lenguaje de programación como ejemplo. Ha explicado que Python exige contar con una gran potencia en la CPU y GPU si se quiere procesar datos científicos. Este lenguaje no se puede ejecutar en dispositivos móviles, por ejemplo, por lo exigente que resulta para la batería y memoria de la máquina.
El objetivo es crear una comunidad de embajadores del desarrollo de códigos verdes y ayudar al sector de las TIC a reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero hasta en un 45% antes de 2030. Eso incluye operadores de redes móviles, ISP, centros de datos y todas las computadoras portátiles que se han instalado durante la pandemia.
No obstante, la limpieza de los códigos y mejora de los lenguajes de programación también supondría una mejora directa para los consumidores que verán mejorado el rendimiento de los dispositivos, un consumo más bajo de la batería de sus productos, además de un trato más respetuoso con el medio ambiente.
«La Fundación es un espacio neutral administrado por la Fundación Linux y diseñado para permitir la colaboración» explican en la web oficial. Por el momento, Goldman Sachs y organizaciones sin fines de lucro, incluidas Leaders for Climate Action y Watt Time se han unido a este proyecto. «Visualizamos un futuro en el que el software libre de carbono sea estándar, donde el desarrollo, la implementación y el uso del software contribuyan a la solución climática global sin que todos los desarrolladores tengan que ser expertos«, ha dicho Erica Brescia, directora de operaciones de GitHub en un comunicado.