Candela C-7 es un fueraborda eléctrico que supera varios hitos. Entre ellos una mayor velocidad, tres veces mas autonomía, y un novesoso sistema de hidroalas para flotar por encima del agua.
Los coches eléctricos han alcanzado la potencia y el rendimiento de la versión de combustible, pero en navegación es mucho más complicado. Los motores de barco consumen 15 veces más que los de coche, y la densidad energética de las baterías es menor que la de la gasolina. Esa es la razón de que los barcos eléctricos tengan poca autonomía y poca velocidad… hasta ahora.
La compañía sueca Candela ha resuelto el problema revolucionando la navegación fueraborda, por medio de un sistema de hidroalas. Literalmente, el barco «vuela» medio metro por encima del agua, ofreciendo menos resistencia y, por tanto, permitiendo al motor eléctrico alcanzar más velocidad y más autonomía.
Un efecto secundario del uso de hidroalas es que como el barco no es golpeado por las olas, navega completamente recto, eliminando los mareos. Puedes verlo en acción en este vídeo:
Las hidroalas son unas pequeñas, pero potentes helices situadas sobre unas palas, que elevan la embarcación por encima del agua. Las hemos visto en tablas de surf e incluso en la bicicleta que navega, pero poco a poco comienzan a implantarse en los barcos y veleros.
Gracias a este sistema el barco eléctrico fueraborda Candela C-7 puede navegar a una velocidad de 30 nudos (56 Km/h), y alcanza una autonomía de 50 millas náuticas, unos 92 Km, con una batería de solo 40 kWh.
Es cierto que otros barcos eléctricos tienen más autonomía, pero usando baterías de más de 300 kWh. A igualdad de carga eléctrica, Candela consigue el triple de alcance.
Otra ventaja importante es que, al tratarse de una embarcación eléctrica, no hace ruido. Así que no molesta a la fauna marina ni a las personas. Y como tampoco contamina, es ideal para usar en puertos o en ciudades inundadas con problemas de contaminación, como Venecia, en donde ya hay algunas unidades en funcionamiento.
Candela C-7 es una mirada al futuro de la navegación: buenas prestaciones, sin mareos, sin contaminación, y sin ruidos. Un futuro que nos gustaría que llegara lo más pronto posible.
Eso sí, por desgracia, como habrás adivinado, estos barcos eléctricos que vuelan por encima del agua, no son baratos. Su precio ronda los 220.000 euros.