Las Torres Gemelas ya solo son un triste y doloroso recuerdo. En su lugar se alza el One World Trade Center, el rascacielos más alto del hemisferio occidental. Entramos dentro.
No vamos a recordar lo que pasó el 11-S, porque todo el mundo conoce la historia. Las Torres Gemelas desaparecieron, y en su lugar se levantó lo que durante su construcción se llamó la Torre de la Libertad.
Finalmente las autoridades decidieron darle un nombre menos político, y lo llamaron One World Trade Center, el rascacielo más alto del hemisferio occidental y el séptimo más alto del mundo, con una altura de 541 metros. La cifra no es casual: equivale a 1.776 pies, el año de la Declaración de Independencia de Estados Unidos (4 de julio de 1.776).
Su construcción comenzó en 2006, y terminó el 3 de noviembre de 2014. Desde entonces se ha convertido en un centro turístico y comercial, con atracciones espectaculares como los ascensores con realidad aumentada, o el Sky Portal. Puedes disfrutar de un recorrido por su interior en este vídeo:
La zona turística del edificio se llama One World Observatory. Los visitantes pagan 43 dólares por una visita estándar (37 dólares los niños, los mejores de 5 años gratis), aunque existen packs que incluyen también una visita a la Estatua de la Libertad.
El acceso se lleva a cabo a través de la planta baja, que parece algo obvio, pero lo interesante es que se puede bajar hasta el interior de la tierra y recorrer los cimientos de la enorme torre, por dentro.
Un recorrido guiado sembrado de pantallas de todos los tamaños y formas, muestran a los visitantes cómo se construyó el edificio, contado por los propios albañiles y arquitectos. Su diseño es obra de David Childs, que también ha construido otros rascacielos famosos, como el Burj Kalifa, el edificio más alto de la historia (828 metros).
Para subir hasta el observatorio hay que coger un espectacular ascensor con realidad aumentada. Mientras asciendes vas viendo imágenes de la evolución de Nueva York, durante el último siglo.
Ya arriba, hay atracciones espectaculares, como el Teatro de la Eternidad, una gigantesca pantalla de docenas de metros de largo, que al elevarse deja ver las incomensurables vistas de Nueva York, a más de 500 metros de altura. El horizonte está a casi 100 Kilómetros.
Otro lugar muy visitado es el Sky Portal, un suelo de cristal con realidad aumentada que permite asomarse al vacío desde cientos de metros de altura.
Y por supuesto no faltan los inevitables restaurantes y tiendas de recuerdos.
El One World Trade Center ya se ha convertido en un lugar de visita obligada, si vas a Nueva York.