La casuística sobre el cambio de velocidad máxima de circulación en ciudad de 50 km/h a 30 km/h por parte de la DGT es variada. Hasta tal punto que hay algunos ayuntamientos que se están planteando subir el límite en algunos casos. Ahora bien, ¿sabes cómo cambia el límite según el tipo de vía? Te lo contamos en 11 casos típicos.
Queda claro que la limitación de velocidad a 30 km/h en carriles de sentido único en ciudad ya ha entrado en vigor y ha llegado para quedarse. Sin embargo los casos donde implica varios carriles, carril bici o de transporte público, pasos elevados, no está tan claro.
Es por ello que la DGT ha organizado un manual de 32 casos prácticos que te resumimos en los 11 más típicos con una fotografía del tipo de calzada y la casuística concreta así como los límites de velocidad anteriores y los que corresponden tras la entrada en vigor de la velocidad máxima a 30 km/h.
Es importante que tengamos claros los límites ya que las multas pueden rondar entre 100 y 300 euros si circulamos al límite de velocidad antiguo según el tipo de calzada.
Como vemos no hay variación en la mayoría de casos en los que teníamos varios carriles a excepción si el segundo carril es para el transporte público, como por ejemplo en la calle Gran Vía de Madrid.
La diferencia es clara cuando hablamos de calzadas de un solo carril, o que contabilicen como un solo carril ya que los carriles reservados para otros vehículos, bien sea transporte público o bicicletas, no contabilizan.
La motivación de este nuevo límite está claro: la seguridad vial, tenga o no sentido. Pere Navarro, director de la DGT, ha comentado que en las calles de las ciudades, cada vez hay más actores y más interacción entre ellos, por lo que no puede garantizarse su seguridad con velocidades superiores a 30 km/h.
De hecho, en 2019, el 82% de los fallecidos en ciudades fueron usuarios vulnerables, es decir, peatones, ciclistas y motoristas.