Entrar en el coche cuando ha estado un rato al sol puede ser algo asfixiante en estos meses calurosos de veranos que nos quedan por delante, pero existe un truco para refrescarlo con rapidez, y sin necesidad de arrancarlo.
A veces solo con saber el tiempo que ha pasado el coche al sol ya se puede prever que su temperatura interior será excesiva, o que el volante y los asientos arderán. De cara a evitar el golpe de calor, cada uno busca distintas opciones, aunque no siempre son todo lo efectivas que se quisiera.
Una de las opciones que existen es entrar, encender el aire acondicionado y esperar con paciencia a que refresque.
Otros más impacientes optan directamente por arrancar y avanzar con las ventanillas bajadas, o por combinar esto con el aire acondicionado, algo no demasiado recomendado. Pero en otras culturas tienen distintos trucos para refrescar el coche con rapidez.
Uno de los trucos que se utilizan en Japón para reducir la temperatura del vehículo con extrema rapidez es bastante sencillo: bajar una de las ventanillas delanteras y abrir y cerrar la puerta del asiento contrario cinco o más veces. ¿Lo has probado? Te sorprenderá, pero tiene su explicación.
Tal como aclaran en El Comercio, este rápido y efectivo truco tiene una base científica. Parte del cambio de presiones en el interior del coche.
Al abrir y cerrar la puerta varias veces se consigue vaciar con rapidez el aire caliente e introducir otro más frío que ayuda a que baje la temperatura, y la sensación térmica. Esto se logra además en cuestión de segundos.
Este truco consigue que se reduzca la temperatura del coche con rapidez al introducirse aire más frío, aunque no atenúa el calor que haya absorbido el volante y que puede molestar a las manos, pero contra eso lo mejor es utilizar elementos de toda la vida, como los parasoles.
En definitiva, recuerda probar este truco japones la siguiente vez que entres en el coche y esté ardiendo. Puedes hacerlo tú solo, es gratuito y no se tarda más que unos segundos. Seguro que te sorprendes con los resultados.