Si quieres saber cuáles son los artículos más demandados del mundo, solo tienes que mirar la bolsa de un contrabandista…
Aunque Hong Kong, Macao y Zhuhai forman parte de China, son regiones administrativas especiales con diferentes leyes de impuestos, niveles de vida y sueldos que en la China continental.
Por eso hay un servicio de aduanas, y el contrabando en el puente Hong Kong-Zhuhai-Macao, que se extiende a lo largo de 55 Km, es habitual.
El pasado mes de junio el servicio de aduanas de Hong Kong detuvo a un grupo de contrabandistas que tenían CPUs de Intel pegadas a su cuerpo con cinta adhesiva, tal como se puede ver en la foto de apertura.
En total llevaban 256 CPUs pegadas a su cuerpo, incluyendo modelos de gama alta como los procesadores Intel Core i7-10700 y Core i9-10900K, lo más caros y demandados.
En otro incidente que se cree que está relacionado, otro contrabandista fue detenido con 52 CPUs de Intel escondidas bajo el asiento del coche.
Incautaciones de este tipo se han multiplicado en los últimos meses, debido a la crisis de los semiconductores, que ha hecho que el stock de chips sea muy escaso, aumentando espectacularmente su precio.
Seguramente estos procesadores provienen directamente de las fábricas, y se intentaban llevar a Hong Kong, en donde habrían aumentado mucho su valor.
Durante el pasado mes también se produjo una de las redadas más espectaculares, cuando la policía de aduanas de Hong Kong incautó 2.200 CPUs, más de 1.000 chips de memoria RAM, y 630 smartphones.
Y lo peor de todo es que la crisis de los semiconductores no terminará a corto plazo. Se espera que se alargue, al menos, hasta 2022.
Aunque en España se pueden encontrar con relativa facilidad procesadores de gama media y alta, es más complicado ver en stock los modelos top.
Mucho peor está el mercado de las tarjetas gráficas, en donde desde hace 10 meses es imposible comprar los modelos RTX de NVIDIA a su precio normal. Hasta hace poco valían 3 o 4 veces más. Por suerte la caída de las criptomonedas ha bajado los precios, pero aún valen el doble de su valor real.