Xiaomi Mi TV P1 55″, análisis y opinión | Tecnología

Xiaomi parece tener claro que el segmento de las TVs es un nicho a explotar y es que no solo hemos podido ver cómo la generación inicial, Mi TV 4S, tuvo gran éxito por ser un modelo con Android TV económico y con una calidad ligeramente por encima de su precio. 

No era perfecta, eso sí, tenía carencias y Xiaomi ha puesto mucho esmero en solucionarlo en esta nueva generación Mi TV P1. ¿Será suficiente como para ser un modelo a recomendar por un precio que ronda los 550 euros para el modelo que probamos de 55 pulgadas?

Algo que queda claro es que la compañía ha hecho un esfuerzo notable en montar un panel de mayor calidad que la generación anterior y es aquí donde vemos el gran salto con esta generación. 

Nos ha sorprendido la calidad antes de calibrar la pantalla, de hecho viene bastante bien de serie y lo que puede ofrecer este panel está muy por encima de lo que podía hacer el modelo del año pasado.

Resumen del análisis del Mi TV P1 55″ por apartados:

Modelo más estilizado que la generación anterior

Si hay algo que podemos comentar de este modelo es que a nivel estético da un paso adelante. No tiene acabado metálico pero el acabado en plástico consigue una gran imitación en los marcos.

Da sensación de ser una TV más premium que la generación Mi TV 4S. Está claro que, en definitiva, una TV se convierte en el centro de entretenimiento del salón y tener una estética moderna también es valorado por el usuario final.

Los marcos de la pantalla son muy estrechos en la parte superior y laterales mientras que en la parte inferior tenemos un marco de plástico más notable. 

En la parte central de esa zona inferior tenemos el botón de encendido y también se encuentra el micrófono para Google Assistant junto con un interruptor físico para desactivarlo.

Es una muy buena noticia para aquellos que no quieren usarlo y desconfían de la privacidad que pueden tener con un micrófono que podría estar, o no, escuchando en todo momento.

Las patas que sujetan la TV son de plástico brillante y un acabado que se aproxima a lo cilíndrico. Ciertamente están situadas muy cercanas a los laterales por lo que quien tenga una mesa estrecha, tendrán dificultades para que esta TV entre sin problemas.

Tiene unas medidas una vez montada de 123,49 x 28,53 x 78,22 cm y su peso es de menos de 12 Kg, como vemos muy ligera para ser una TV de 55 pulgadas, y es aquí donde ese plástico muestra su gran ventaja frente a materiales más premium.

No es un modelo especialmente delgado pero tampoco muestra un grosor por encima de lo que otras compañías están lanzando. Es un grosor aceptable para un panel VA con iluminación edge LED.

Los conectores de entrada están situados en la parte trasera izquierda según vemos la pantalla mientras que el de alimentación se encuentra en la derecha. 

Veremos en detalle las conexiones en su correspondiente apartado.

El mando a distancia es de plástico mate con un diseño típico con un botón de navegación central y una cruceta cubierta por un plástico circular. Tiene accesos directos a Netflix y Prime Video y un botón para activar Google Assistant.

Es una mando a distancia típico de las teles con Android TV que tienes que conectar a la TV durante la configuración, dejando pulsadas dos teclas del mismo. Después de ello funciona mediante infrarrojos salvo para el envío de los datos del micrófono cuando pulsamos el correspondiente botón.

Mejoría notable de calidad, por encima de su rango de precio 

Si hay algo que la generación anterior de TVs de Xiaomi que tras analizarla nos gustaría que mejorasen en términos de brillo y contraste y sobre todo en cuanto a ángulos de visión.

En la generación Mi TV 4S comprobamos cómo su panel tenía una variación notable de color en al variar el ángulo de visión de manera vertical. Es decir, de ver la TV de pie a la hora de verla sentado ya había una gran diferencia. 

Esta nueva generación el Mi TV P1, al menos el modelo de 55″ que es el que hemos analizado, tiene un panel VA que mejora en ese sentido, aunque claro sigue habiendo diferencias frente a un panel IPS.

Este modelo mejora ligeramente los ángulos de visión verticales, sin embargo, los ángulos de visión horizontales siguen siendo los típicos de paneles VA, notándose cambios de color cuando sales de entre 20º y 25º de la perpendicular.

Hablando de términos de brillo también mejora frente a la generación anterior. Es cierto que Xiaomi no da el dato de brillo máximo del panel, aunque sí que comenta que estamos ante un panel compatible con contenidos HDR y también con Dolby Vision. 

No es un panel de 10 bits, es 8 bits + FRC, pero ofrece un resultado decente en términos de color. La frecuencia de refresco de este panel es 60 Hz, es decir, la típica y tradicional.

Según nuestras mediciones el brillo no es el punto más fuerte del panel, quedándose en algo menos de 370 lux en contenidos noHDR y pasando ligeramente los 400 lux en contenidos HDR10, HDR10+ y Dolby Vision.

Algo que nos ha parecido notable es la profundidad de las zonas oscuras de la imagen mostrada en pantalla, muy por encima de otros modelos de este rango de precio. Utiliza Edge LED y consigue una gran uniformidad en la retroiluminación.

Hereda los modos de imagen de la generación anterior unido el modo Dolby que salta cuando empiezan a reproducirse contenidos en ese modo. Recomendamos hacer una calibración en el modo personalizado.

Una vez ajustada, la calidad que ofrece, siempre dentro de la zona central de ángulos de visión, nos ha parecido muy buena para el rango de precio en el que nos movemos.

La reproducción de contenidos HDR mejora el contraste al subir ligeramente el brillo máximo, además, la fidelidad de color es algo superior que con contenidos no HDR.

Android TV 10 bien, pero no todo lo fluido que nos gustaría

Xiaomi sigue apostando por el software de Google que vimos el año pasado. De hecho, echando un ojo a atrás, vemos cómo monta la misma cantidad de RAM, 2 GB. Sin embargo sí que han mejorado el procesador que sigue siendo Mediatek quad-core 1,5 GHz, pero el modelo Mediatek 9611.

La versatilidad de Android TV 10 es conocida dentro del mercado de los sistemas operativos para smartTVs.

En particular, Xiaomi, hace uso de la versión nativa de Google y da la opción de utilizar una nueva capa de software, Patchwall. Es una capa que está puliendo Xiaomi y que nos da recomendaciones según el uso que hagamos.

Según mi experiencia de uso, prefiero la capa tradicional de Google con filas que muestran carruseles de apps, juegos, y contenidos de los servicios de streaming. Es más limpia y natural si estás acostumbrado a servicios Smart TV.

Durante nuestro uso hemos notado que en ocasiones la Mi TV P1 se atraganta durante la navegación tardando algún segundo en reaccionar a los comandos que mandamos desde el mando a distancia.

Según recibimos la TV y configurarla, llegó una notificación mencionando una actualización de software. En ella se añade soporte de Alexa al que podemos acceder dejando pulsado el botón de Prime Video.

Algo que hemos notado frente a otras smart TVs con el sistema operativo de Google es que el reconocimiento del comando OK Google es demasiado sensible llegando a saltar cuando en la TV se reproduce contenido y dicen algo similar, es decir, de su propio audio.

Nos gusta las opciones de configuración de la TV tanto a nivel audio / vídeo como también a nivel de sistema operativo y aplicaciones. Android TV 10 permite configurar rápidamente aplicaciones y login gracias al uso de contraseñas guardadas en tu cuenta de Google.

Y como extra que tienen todos los smart TV con Android TV es la opción de tener Chromecast integrado, es decir, podrás mandar contenidos desde tu móvil como si de un Chromecast se tratara.

Versatilidad de conexiones y soporte de juegos 

Si hablamos de la conectividad de este modelo nos encontramos con una variedad notable de puertos físicos además de conectividad Bluetooth y WiFi (2,4 y 5 GHz).

En cuanto a conectividad para dispositivos externos audio/vídeo estamos ante conexión AV tradicional con tres RCA y 3 puertos HDMI, tradicionales, uno de ellos con soporte de eARC para retorno de audio inteligente y ser usado con, por ejemplo barras de sonido.

Para la salida de sonido también tiene soporte de salida óptica S/PDIF y minijack además de la posibilidad de conectar dispositivos de audio Bluetooth.

Este modelo tiene dos puertos USB para conectar periféricos o bien dispositivos de almacenamiento externo que poder utilizar con o desde Android TV.

Para la conexión a red integra un puerto ethernet que completa la conectividad Wi-Fi dual band que integra.

Y para el uso como TV pues ofrece conectividad de antena DVB-T2 y DVB-S2. Podremos ver canales de pago de satélite mediante el uso de la Ranura CI. 

Como vemos conectividad estándar de la mayoría de TVs actuales con el añadido del soporte de dispositivos por Bluetooth. Aquí es donde hilamos con el soporte de mandos para poder echar partidas a juegos Android.

El SoC que integra este modelo es el mismo que la TV de gama alta de Xiaomi, la Xiaomi Q1 de 75″ y permite echar partidas a juegos a una tasa de frames jugables.

Hemos podido jugar a Asphalt sin tirones e incluso hemos podido jugar a Genshin Impact, aunque en este caso bajando algo la exigencia gráfica ya que la Mali G52 del Mediatek MT9611 queda algo justa para esta tarea.

Está claro que no es la función principal de esta Mi TV P1, pero siempre se agradece que de manera casual podamos echar una partida a toda pantalla.

Modelo a tener en cuenta si tienes presupuesto ajustado

Una vez visto el modelo y probado durante unas semanas podemos comentar que nuestras sensaciones iniciales sobre el panel montado en el modelo de 55″ pulgadas se corroboran. Es un buen panel y ofrece una buena calidad de imagen tras calibrarla ligeramente.

Hay que ser conscientes de que no se puede esperar de un modelo de alrededor de 550 euros lo mismo que de modelos de 1.000 euros y evidentemente el nivel de brillo máximo dista de estos últimos así como también la calidad en acabados.

Sin embargo este modelo tiene muchos pros, como por ejemplo: Android TV y la versatilidad que ello da, la profundidad de negros para ser un modelo EdgeLED con panel VA y el soporte de control por voz mediante Google Assistant.

Aquí queremos hacer notar que el análisis de este modelo no es válido o replicable para los modelos de 50″, 43″ y 32″ en términos de calidad de imagen, ya que los paneles montados son distintos.

Proceden de distintos fabricantes e incluso, según nuestras informaciones, de distinto tipo en el modelo de 43 pulgadas e incluso de resolución en el modelo de 32 pulgadas.

Este modelo Mi TV P1 de 55 pulgadas nos ha gustado, y mejora la experiencia de uso que tuvimos con el Mi TV 4S. La calidad de imagen ha mejorado bastante, el sonido es suficiente para llenar un salón medio de 15-20m2 aunque si quieres fidelidad en las frecuencias más graves recomendamos, como en modelos de gama más alta, un sistema de audio externo.

Es un plus el soporte de Dolby Vision y es que parece que será uno de los estándares más populares HDR del futuro, unido a Dolby Atmos para audio. 

Como vemos, es un modelo que destaca por su relación calidad-precio y si no eres un usuario muy exigente ni vas a necesitar una pantalla de 120 Hz para usar con consolas de última generación es una opción bastante interesante que lucha de tú a tú con alternativas con marcas que llevan más años en este sector como HiSense, Samsung, Sony o LG.