Si vas a viajar por carretera con tu perro o gato, toma nota de cuál es la forma más segura de llevar a tu mascota en el coche según la Dirección General de Tráfico.
Si eres el feliz propietario de un perro o un gato y vas a llevarlo contigo de vacaciones, es importante que sigas una serie de recomendaciones para garantizar un viaje seguro.
Aprovechando que hoy, 21 de julio, se celebra el Día Mundial del Perro, la DGT ha querido recordar a través de su cuenta de Twitter lo importante que es llevar a los animales bien sujetos y ubicados en el lugar más adecuado de nuestro vehículo.
Tráfico ha compartido un vídeo del RACE que muestra las graves consecuencias que puede tener llevar a tu mascota suelta en el coche. El clip que te hemos dejado un poco más abajo nos permite ver una simulación de una colisión frontal a 50 km/h en la que se ha utilizado un maniquí de un perro de 22 kg de peso.
En caso de viajar en el asiento trasero, al sufrir una colisión el animal impactaría contra el asiento delantero, sufriendo un golpe gravísimo para su integridad física y para la del pasajero que vaya sentado delante, ya que su peso se multiplica por 25.
Por este motivo, para garantizar la seguridad de las mascotas resulta de vital importancia transportarlas de la manera correcta. La DGT explica que, si el animal es pequeño, la mejor forma de llevarlo en el coche consiste en introducirlo en su transportín y situarlo en el suelo del vehículo.
Si tu mascota es grande, la mejor opción es poner el transportín en el maletero en posición transversal a la dirección de la marcha. Además, es recomendable combinar este sistema con la rejilla divisoria para incrementar la seguridad.
La DGT desaconseja por completo cualquier otro sistema que no implique una sujeción adecuada, incluso en trayectos cortos. No permitas que los perros o gatos viajen sueltos en brazos de otros pasajeros, ya que pueden escaparse y afectar a la atención del conductor.
Además, por llevar tu mascota suelta en el interior del vehículo pueden ponerte multas de hasta 500 euros. Hay sanciones leves desde 80 euros si el animal va sujeto de forma incorrecta y otras de 200 o 500 euros en caso de que no vaya amarrado. Incluso si viaja en el regazo del conductor implica la retirada de 6 puntos del carné de conducir.