Con el coche como principal medio de transporte, tenerlo en buen estado es fundamental para nuestra seguridad y para pasar la ITV sin complicaciones, por eso os decimos qué puntos son clave pese a que no nos acordemos.
Visitar la ITV es un momento que todo conductor teme y retrasa hasta el último momento.
Y es normal, una valoración negativa nos obliga a ir al taller a reparar y reponer piezas. Algo que implica tiempo y dinero, y de eso nunca vamos sobrados.
Para estas citas no basta con echar un vistazo al coche, sino que la revisión es a conciencia, y eso implica fijarnos en elementos que forman parte del vehículo pero que no reparamos en el día a día.
Por eso, en este artículo vamos a repasar qué partes debes supervisar antes de ir a la ITV, ya que si no podríais volver a casa con un suspenso para nada agradable, y menos cuando dependéis del coche en vuestro día a día.
Esta es la lista con las partes menos obvias de las revisiones de ITV:
- Asientos: El Manual de procedimiento de inspección de estaciones ITV señala que los vehículos deben disponer del número de plazas para las que están autorizados, que tienen que estar anclados a la estructura de forma resistente y ser adecuados a su función. Un fallo aquí es falta grave.
- Ventanillas: Todas las ventanillas deben bajar y subir con normalidad, ya sean eléctricas o manuales. Si alguna falla se anotará como falta leve.
- Matrícula: Además de estar en buen estado y poder leerse con claridad, la matrícula debe tener las dos bombillas en funcionamiento, tener solo una de las dos se considera falta leve.
- Líquido limpiaparabrisas: Pese a que parezca una broma debemos tener el depósito lleno para poder limpiar la luna frontal del coche en caso de emergencia. La falta de líquido se considera falta leve.
- Ruedas: Además de estar en buen estado, con su dibujo correspondiente, llevar los neumáticos bien hinchados es una cuestión de seguridad y en las ITV se suelen fijar. Sería otra falta leve el llevarlas flojas.
- Puertas: Que la puerta del conductor se abra es algo que todos damos por sentado, pero muchas veces una puerta de no usarla se acaba atascando, lo que nos acarrearía otra falta leve.
Recordad que más allá del motor, los frenos y las luces, el coche se compone de muchas partes que son susceptibles de fallo, y pese a que son menos evidentes no por ello dejan de ser importantes.
Varias faltas de estas nos pueden fastidiar una mañana de ITV, por eso os aconsejamos que reviséis dichos elementos antes de ir a la ITV, para así ahorrarnos un susto y tiempo, que la espera no suele ser breve. Por cierto, si os toca pasarla este 2021 estos cambios os interesan.