Este dispositivo impreso en 3D de bajo coste puede detectar variantes de COVID-19 en tu saliva | Tecnología

Gracias a este dispositivo, permitirá al propio usuario verificarse para saber si cuenta con la enfermedad, incluso detectando múltiples variantes.

Uno de los problemas que está retrasando el fin de la pandemia del COVID-19 son las variantes, unas variantes que están causando un quebradero de cabeza a los científicos, y que para controlarlas se requiere de una rápida detección para que sean tratadas antes de que sea demasiado tarde.

Ahora científicos han logrado crear un nuevo dispositivo impreso en 3D de bajo costo que puede detectar variantes del COVID-19 en la saliva, en menos de una hora, y pudiendo hacerse la prueba en casa.

Investigadores del Instituto Wyss de Ingeniería de Inspiración Biológica de la Universidad de Harvard, el Instituto de Tecnología de Massachusetts y varios hospitales del área de Boston han creado un dispositivo de diagnóstico basado en CRISPR que permite a los propios usuarios probarse a sí mismos para detectar múltiples variantes del virus SARS-CoV-2 proporcionando resultados prácticamente al momento y siendo interpretados por una aplicación móvil.

El dispositivo llamado miSHERLOCK es capaz de distinguir con éxito entre tres variantes diferentes e incluso puede reconfigurarse para detectar variantes adicionales como la Delta. El dispositivo puede ensamblarse en piezas creadas en base a impresión 3D por un coste no superior a 15 dólares, e incluso pueden reutilizarse distintas partes reduciendo el costo de los ensayos a tan solo 6 dólares.

MiSHERLOCK elimina la necesidad de transportar muestras de pacientes a una ubicación de prueba centralizada y simplifica enormemente los pasos de preparación de muestras, brindando a los pacientes y médicos una imagen más rápida y precisa de la salud individual y comunitaria, que es fundamental durante una pandemia en evolución”, señala Helena de Puig del Instituto Wyss y del MIT.

Hacerse la prueba es muy sencillo, donde un usuario escupe en la cámara de preparación de muestras, enciende el dispositivo y espera de 3 a 6 minutos a que la saliva penetre en el filtro. Posteriormente, el usuario quita el filtro y lo transfiere a la columna de la cámara de reacción, empujando un émbolo que deposita el filtro en la cámara y perfora un depósito de agua para activar la reacción.

Unos 55 minutos más tarde, el usuario podrá mirar a través de la ventana del transiluminador para confirmar la presencia de una señal que podrá ser reinterpretada por una aplicación de teléfono móvil.

Para las pruebas, tomaron muestras clínicas de saliva de 27 pacientes con COVID-19 y 21 pacientes sanos, y encontraron que el dispositivo identificó correctamente a los pacientes positivos del COVID-19 en el 96 %, y a los pacientes sin la enfermedad en el 95 % de las veces.

Una de las mejores cosas de miSHERLOCK es que es completamente modular. El dispositivo en sí está separado de los ensayos, por lo que puede conectar diferentes ensayos para la secuencia específica de ARN o ADN que está tratando de detectar”, afirma Devora Najjar, asistente de investigación en el MIT Media Lab y en el Laboratorio Collins.

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