El estado de Maine, en EE.UU., ha sorprendido revocando los permisos a las Mitsubishi Delica que habían sido legalmente importadas. ¿Estarán más coches en riesgo?
Las normativas de importación de vehículos en los Estados Unidos pueden complicar que determinados modelos puedan llegar allí, pero ahora también pueden estar en peligro algunos que ya habían sido admitidos en el país. Es el caso de la Mitsubishi Delica en el estado de Maine, donde se ha notificado a los dueños que deben anular el registro de sus vehículos y no conducirlos en la carretera.
La razón, según reza el comunicado que se ha hecho llegar a los propietarios, es que el estado considera ahora que se trata de un vehículo exclusivamente todoterreno. De esta forma, según la normativa vigente ese tipo de furgonetas no pueden ser utilizadas en la vía pública bajo ningún concepto.
Esto ha sorprendido a muchos allí, donde hasta ahora nunca se había puesto en duda la legalidad de estos vehículos. Para quien no la conozca, la Mitsubishi Delica es una especie de furgoneta más enfocada al off-road, por lo que se encuentra a medio camino entre ambos mundos. La primera variante data de 1968, pero desde entonces ha ido evolucionando y aún se siguen fabricando en China. Es un modelo con muchos seguidores alrededor del mundo dada su configuración, pero lograr su traslado a determinados países puede ser complicado.
La importación de coches en EE.UU.
Dada la normativa estadounidense, solo se permite la importación de coches si nunca se han vendido en ese país o si tienen más de 25 años de antigüedad, aunque no cumplan determinadas normas de seguridad u homologación. Por ello, la generación más reciente de la Delica que cumple los requisitos es la cuarta. Fue fabricada entre 1994 y 1996 y es una de las versiones más populares de este modelo, ya que llegó a compartir el motor y la transmisión con el famoso Mitsubishi Pajero -o Montero, dependiendo del país-.
Teniendo esto en cuenta, estas furgonetas no contaban con ningún problema legal para circular allí, pero ahora el estado de Maine ha tomado la decisión de englobarlas en el mismo grupo que los quad, a pesar de ser dos vehículos totalmente distintos. En cualquier caso, esto quiere decir que las Delica que ya se encuentren allí solo podrán ser utilizadas para tareas de granja o similares, y tan solo se permitirá la circulación por carretera de las pocas unidades que Mitsubishi sí vendió entre 1987 y 1990 en ese estado.
Sin duda, esto ha indignado a los propietarios, que no entienden por qué se ha puesto foco en esta furgoneta y no en otros coches. Sin embargo, a esa indignación se ha unido la preocupación, algo que puede extenderse a muchos otros propietarios de modelos importados.
Según comentó a Jalopnik Emily Cook, asistente especial a la Secretaría del Estado, “cuando descubrimos que un vehículo de este tipo ha sido registrado de manera inapropiada, revocamos ese registro”. Esto, según señala, se lleva a cabo “para garantizar la seguridad en las carreteras de Maine y proteger el medio ambiente». Y es que consideran que las Mitsubishi afectadas no cuentan con determinadas normas de seguridad y emisiones que se requieren allí.
Por lo tanto, no es descabellado pensar que este tipo de situaciones se puedan repetir con otros modelos provenientes de Japón u otros países en los Estados Unidos. Esto podría afectar a algunos como el Nissan Skyline o el Nissan Silvia, pero también a modelos más equiparables a la Delica como la Toyota Hiace. ¿Empezarán a desaparecer estos vehículos de las carreteras norteamericanas?
Este artículo fue publicado en Top Gear por Sergio Ríos.