Nuevo sistema operativo, las mismas trabas e inconvenientes de siempre: Microsoft quiere que uses su software en Windows 11, y no el de la competencia.
Los tiempos cambian, pero las malas costumbres permanecen. Aunque no podemos culpar solo a Microsoft. También lo hacen Apple o Google, con sus respectivos sistemas operativos.
Windows 10 suele poner bastantes trabas cuando intentas instalar aplicaciones que son competencia directa de Microsoft. Y por lo que parece estas trabas van a aumentar en Windows 11.
Según ha descubierto The Verge, cuando intentas instalar en Windows 11 un navegador que no es Microsoft Edge, es aún más complicado que en Windows 10.
Si instalas un navegador diferente a Edge en Windows 10, te pregunta si lo quieres como predeterminado. En Windows 11 si no es Edge no lo usa como predeterminado, así que tienes que fijarlo tu manualmente. Pero no es una tarea sencilla.
En el sistema actual, Windows 10 tiene una sección de apps predeterminadas: navegador, correo, visor gráfico, etc.
Si estás usando una app de Microsoft como predeterminada en Windows 10 pero quieres cambiarla por otra, Windows insiste en que no lo hagas, y tras un par de intentos de convencerte se rinde y te deja hacerlo.
En Windows 11 no existe la ventana de apps predeterminadas, sino que hay que elegir app predeterminada para cada extensión de fichero.
Eso significa que no basta con elegir Edge, Chrome o Firefox por ejemplo, y listos. como ahora. En Windows 11 tienes que asignar por separado una a una, todas las extensiones que usan las webs: HTM, HTML, PDF, SHTML, SVG, WEBP, XHT, XHTML, FTP, HTTP, y HTTPS.
Quizá sea más selectivo, pero también mucho más laborioso y pesado para quien desee cambiar las apps predeterminadas.
En este vídeo puedes ver cómo hay que ir cambiando una a una todas las extensiones, en un proceso tremendamente tedioso e innecesario, porque normalmente quien quiere usar otro navegador, lo quiere usar para todo:
Estas opciones han aparecido en la última beta de Windows 11, pero aún faltan unos meses para que la versión final llegue a los usuarios.
Confiemos en que Microsoft se lo piense dos veces y permita cambiar las apps predeterminadas de manera más cómoda y rápida para los usuarios.