Microsoft te dejará que te instales Windows 11 en un equipo no compatible, pero no te ofrecerá actualizaciones de ningún tipo.
Ayer aquellos usuarios que tienen un ordenador antiguo que no cumple con los requisitos de Microsoft para instalarse el futurible Windows 11 se llevaron una buena noticia al confirmar los de Redmond que finalmente se podrían instalar el nuevo sistema operativo a través de un archivo ISO, algo que podría favorecer a aquellos usuarios experimentados que ya no se veían en la necesidad de comprarse un nuevo ordenador para dar el salto al nuevo sistema.
Sin embargo hoy tenemos malas noticias, porque si bien Microsoft ha vuelto a señalar que mediante un archivo ISO el usuario va a poderse instalar Windows 11 en un ordenador que no cumpla con los requisitos, vas a tener que conformarte con un Windows 11 que no pueda actualizarse, ni con esas actualizaciones de seguridad tan importantes.
Según parece, si te instalas Windows 11 en un equipo que no cumpla los requisitos, se estará ejecutando en una especie de “estado no admitido” con lo que tampoco recibirá actualizaciones de Windows 11, incluidas las importantes de seguridad que son cruciales para corregir vulnerabilidades peligrosas.
Esto afectará bastante a que Windows 11 pueda establecerse como el sistema operativo más utilizado durante los primeros dos o tres años de su disponibilidad, porque gran parte de los ordenadores no cumplen con los requisitos que exige, y al mismo tiempo mucha gente no querrá tomar el riesgo de tener un nuevo sistema operativo que no podrá actualizarse en su equipo.
Si eres de los valientes con el archivo ISO de Windows 11 y no te importa que tu ordenador esté expuesto a amenazas de seguridad solo deberías contar con un procesador de 1 GHz de 64 bits de dos o más núcleos, 4GB de RAM y 64GB de almacenamiento.
Se desconoce por qué Microsoft está poniendo tantas trabas para que los usuarios puedan actualizarse a Windows 11, pero es probable que conforme se acerque el final de ciclo de Windows 10 muchos requisitos puedan adaptarse a equipos menos favorables.