La crisis de los chips está afectando a la producción de dispositivos y el Galaxy S21 FE parece ser su última víctima.
Aunque no seas aficionado a la tecnología, seguro que ya conoces la crisis que se está sufriendo en todo el planeta con los semiconductores. Esta sigue creciendo y todavía no sabemos hasta dónde llegarán sus consecuencias en el futuro, pero hoy día ya vivimos algunas, como aumentos de precios o retrasos en dispositivos.
Hace unos días informamos que la llegada del Samsung Galaxy S21 FE es inminente y algunas de sus características, como el procesador Qualcomm Snapdragon 888 con 8GB de RAM, panel de 6,5″ Super AMOLED Infinity-O, tasa de refresco de 120 Hz… Ahora además se informa que probablemente se empiece a producir pronto, aunque hay dudas.
Según publican en Android Authority, se ha sabido que se quería producir el Galaxy S21 FE en el primer semestre de 2021 y que ya estuviese a la venta a estas alturas de año. Sin embargo, ha sido víctima de la crisis de semiconductores y sufrido un retraso importante.
El medio surcoreano The Elec ha informado que con este móvil el calendario del fabricante se retrasó cuatro meses a causa de la escasez de componentes.
En este momento se manejan fechas como el 9 de septiembre para el lanzamiento, pero su disponibilidad real podría retrasarse hasta octubre o noviembre. La ralentización es generalizada y en Samsung tampoco han confirmado ninguna información al respecto.
Entre los datos que se manejan, en ocasiones contradictorios, está el que se haya dado prioridad con los componentes a los móviles plegables, lo que pudo provocar que se detuviese la producción de este dispositivo.
Ahora una de las grandes cuestiones que hay en el mercado es cómo afectará esta situación al lanzamiento del Galaxy S22 del año que viene. Si se acumulará retraso, le atañerá de algún modo o podrán seguir con los plazos previstos… Son tiempos inciertos, pero si quieren lanzarlo a principios de 2022 deberían empezar a producirlo en unos meses. Veremos cómo avanza esta crisis.