Si una prenda que te encanta te queda un poco grande, tienes la posibilidad de conseguir que se ajuste mejor de una forma sencilla. Toma nota de estos consejos para encoger la ropa en casa.
Hay diferentes motivos por los que la ropa nos queda grande. Es posible que te hayas equivocado de talla y que haya pasado el plazo para cambiar la prenda, puede ser que hayas perdido peso, o también que el tejido se haya dado de sí.
Independientemente de cuál sea la causa, tienes a tu alcance algunos trucos para encoger la ropa y conseguir que se ajuste mejor. El resultado final varía en función de las características de cada tela y de la confección de la prenda, pero lo más seguro es su tamaño se reduzca al menos un poco para que te quede mejor.
Por lo general, para encoger la ropa de cualquier tipo de tejido el procedimiento más eficaz consiste en lavar la prenda con agua caliente y secarla en la secadora con una temperatura alta. Según Mary Gagliardi, experta de Clorox, este truco es eficaz en todo tipo de telas, desde algodón 100% hasta viscosa, que no hayan sido tratadas previamente para prevenir el encogimiento.
No obstante, utilizar este método también puede suponer algunos problemas. Si la prenda tiene un color vivo puede que pierda intensidad, y además la textura de la tela puede quedar dañada. Otro problema es que las prendas no encogen de manera uniforme, de manera que quizás consigas reducir la longitud pero no el ancho, o viceversa.
A continuación te dejamos otros trucos para encoger la ropa en función de su tipo de tela:
- Algodón o poliérter. Introduce las prendas al revés, lava a máxima temperatura y seca en la secadora también con la temperatura más alta. También puedes hervir las prendas en una olla durante media hora y después secarlas en la secadora.
- Nailon. En el caso del nailon, el calor puede derretir las fibras, por lo que el método tradicional no funcionará. Prueba a lavar la ropa del revés en un recipiente con agua caliente y un poco de amoniaco para que el color se conserve. Deja en remojo durante una hora y luego seca en la secadora a temperatura media.
- Lana o cachemira. Las fibras de origen animal como la lana o la cachemira son muy sensibles al calor y cuando se lavan a altas temperaturas no solo encogen, sino que el tejido también puede afieltrarse y perder su apariencia original. Por este motivo, lo mejor es empapar la prenda en agua tibia, secar con una toalla y meterla en la secadora a temperatura media.
Y si quieres realizar el proceso inverso, aquí te dejamos algunos trucos caseros para desencoger la ropa y conseguir que aumente de tamaño.