Este sistema sabrá en todo momento lo que estás haciendo dentro de tu vehículo autónomo, y jamás te dará el control del mismo hasta que estés totalmente listo.
Quizás en un futuro estemos en un ecosistema autónomo tan desarrollado en nuestras carreteras que los coches puedan conducir sin necesidad de interacción del propio conductor.
Pero mientras eso llega, podríamos enfrentarnos a una situación híbrida en la que los conductores apuesten por algún sistema de piloto automático, pero teniendo que estar disponibles para tomar el control del vehículo en cualquier momento.
Pero esto puede tener un riesgo, porque quizá ese sistema necesite que el conductor tome el control del volante en un momento en particular, pero no se encuentre disponible, sea porque se encuentre durmiendo, hablando con los pasajeros o incluso por el teléfono móvil, lo que podría desencadenar en algún tipo de accidente.
Así que es interesante la tecnología que están desarrollando los investigadores del Instituto Fraunhofer de Optrónica, Tecnologías de Sistemas y Explotación de Imágenes de Alemania que han desarrollado nuevos sistemas de inteligencia artificial que podrían verificar si el conductor puede tomar el control del vehículo en un momento determinado.
Los algoritmos serían capaces de analizar los datos de las cámaras en tiempo real y descubrir de esta manera si el conductor está hablando por teléfono, jugando con los niños o incluso durmiendo, para saber si cederle o no el control del vehículo.
Este sistema de cámaras admite cámaras de vídeo tradicionales o bien cámaras de infrarrojos capaces de ver en la oscuridad, así como cámaras 3D que miden la distancia entre los objetos y los propios visores de la cámara.
Por otra parte el ordenador del coche analizaría el vídeo de las cámaras en tiempo real utilizando algoritmos basados en inteligencia artificial para determinar la posición del conductor y el resto de los pasajeros, pudiendo comparar esa posición actual con otras ya establecidas para saber si el conductor está durmiendo, hablando por teléfono o realizando otras actividades.
Si en un momento el conductor necesitara tomar el control, el sistema antes verificaría si la persona está lista para conducir. En el caso de que el conductor no esté listo para conducir, el sistema calcularía cuánto tiempo le llevaría volver a tomar el control y seguiría en piloto automático un poco más.
De esta manera, se evitarían accidentes dado que el sistema jamás apagaría el piloto automático antes de comprobar que está disponible el conductor.
“De este modo, los algoritmos pueden decir si alguien está durmiendo o mirando la calle, qué tan distraído está y cuánto tiempo le llevará volver a concentrarse en la carretera”, explica Michael Voit, director de grupo de Fraunhofer IOSB.
«No solo podemos detectar las actividades del conductor, sino también las de todos los pasajeros, tanto en la parte delantera como trasera del vehículo«, añade.