La fibra óptica es actualmente la forma más rápida y estable de acceder a Internet. Cada día hay más domicilios y empresas con esta conexión y los operadores ofrecen velocidades que van desde 50 Mbps hasta unos mareantes 1.000 Mbps (1 Gigabit por segundo). Sin duda, un servicio a años luz de lo que teníamos hace un lustro.
Sobre el papel, esto supone navegar de 5 a 50 veces más rápido que con una conexión ADSL convencional. Es decir, gracias a la fibra óptica y a los routers de última generación que proporcionan las operadoras, sí suele llegar la velocidad que has contratado hasta tu casa.
Sin embargo, la realidad es que muchos usuarios no notan una gran diferencia cuando se conectan a Internet desde su ordenador, teléfono móvil, consola o Smart TV, tras haber contratado una conexión de fibra óptica. Pero ¿por qué ocurre esto? A continuación, te explicamos cuál es el problema y cómo puedes resolverlo.
Cómo aumentar velocidad:
Tenemos un problema con el router WiFi
A diferencia de lo que ocurre actualmente en países como Alemania o Italia, en España no existe libre elección del router de la operadora. Esto significa que, cuando contratas un servicio de acceso a Internet mediante fibra óptica, tienes que usar el router que te ofrece tu operador, y en ocasiones incluso deberás pagar un extra por él.
Sin embargo, por diferentes razones, estos routers no siempre son los más modernos ni los que cuentan con mejores características de velocidad o seguridad.
Por motivos comerciales, se trata de routers de bajo coste, pensados para dar un servicio básico a todos los usuarios, pero no siempre ofrecen las prestaciones necesarias para cubrir las necesidades de cobertura y velocidad que el usuario necesita por las características de su vivienda.
Esto se nota, sobre todo, en la velocidad de conexión, que en ocasiones no alcanza el rendimiento que el usuario esperaba al contratar. Aunque en otras ocasiones puede que no sea responsabilidad del router y si de algún otro motivo.
Conectar con cable o por WiFi
Como sabrás, existen dos maneras de conectar un dispositivo al router para acceder a Internet. La más elemental es usar un cable de red para conectar el ordenador, el portátil o el televisor directamente al router. Esto permite tener un acceso instantáneo a la Red y navegar a la máxima velocidad que tenemos contratada.
Sin embargo, este método no resulta nada práctico cuando tienes varios dispositivos en casa, o si quieres conectar otros aparatos que no disponen de un puerto de red, como por ejemplo un smartphone, una tableta o cualquiera de los dispositivos de Internet de las cosas que últimamente se están convirtiendo en un elemento imprescindible para el hogar conectado.
En estos casos, es preferible usar el otro tipo de conexión: la red inalámbrica. Todos los routers actuales ofrecen una red WiFi, que resulta mucho más cómoda al no necesitar ningún tipo de cable ni estar cerca del router, además de poder conectar un número ilimitado de dispositivos.
Sin embargo, por razones técnicas, navegar por Internet por WiFi acostumbra a ser más lento que hacerlo conectado a un cable de red. Si a esto le sumamos que el router no se encuentra cerca del dispositivo, o hay varios aparatos conectados a la vez, el rendimiento de la conexión puede estar muy por debajo del esperado.
De todas formas, esa lentitud puede ser debido a otro tipo de circunstancias que se pueden arreglar de manera más sencilla de lo que parece en un principio.
Puedes hacer la prueba tú mismo, realizando alguno de los test de velocidad de conexión disponibles en Internet.
Para intentar solucionar estos problemas podemos realizar ciertas tareas que pueden hacer que las incidencias se solucionen o directamente optar por otro tipo de respuestas algo más drásticas.
Soluciones básicas
Existen una serie de tareas que podemos realizar para conseguir que nuestra conexión vuelva a funcionar de manera veloz y sólida.
No siempre funcionan, pero deben ser las primeras soluciones que debemos tener en cuenta, por ser las más simples y rápidas de realizar.
Reiniciar el router
Es lo primero que podemos probar, ya que en ocasiones el router se carga de tantos datos, incluso algunos corruptos, que puede provocar que la velocidad sea notablemente más lenta.
Si esto es algo que pase a menudo, entonces puede que tengamos un problema dentro de dispositivo.
Actualizar Windows y los drivers
Tener Windows actualizado a lo último de lo último también puede salvarnos de perdida de velocidad, ya que puede ser que desde Microsoft hayan detectado tal problema con el WiFi y lo solucionen en ese parche que te falta por instalar.
Los drivers del router y de la tarjeta de red también puede ser conveniente que los podamos actualizar si no los tenemos en su última versión. Es tan fácil como ir a la web de ambos dispositivos y descargarlos.
Prueba a colocar el WiFi en otro lugar
No os podéis imaginar la cantidad de veces que la perdida de velocidad es por donde está situado el router, así que podría ser una brillante idea colocarlo en otro sitio lo más alejado posible de donde estaba, para comprobar que la velocidad en toda la casa vuelva a ser buena.
Esto es algo muy sencillo de realizar, pero sumamente complicado de saber cuál es el mejor lugar a la primera. Seguramente tendrás que colocarlo en distintos sitios hasta dar con el mejor.
Intrusos en la red
Si las soluciones anteriores no han surtido efecto, puede ser que los problemas sean de otra índole un poco más grande, como puede ser que tengamos algún vecino o intruso en la red que nos esté ocupando todo el ancho de banda.
Para poder comprobar si tenemos a alguien que está ocupando nuestra red, podemos optar por un software para ordenador muy eficaz en este sentido como es Wireshark.
Este programa nos va a permitir comprobar que dispositivos tenemos conectados la red inalámbrica, para de esta manera, controlar si hay algún tipo de aparato que no es de la unidad familiar, algo que saltara a la vista si en nuestra casa hay seis equipos que conectan por WiFi, pero en el software aparecen más.
Si hemos identificado al intruso, lo mejor que podemos hacer es entrar en nuestro router y cambiar la contraseña de inmediato. Lo siguiente sería reiniciarlo para que toda persona que no tenga el nuevo password se pueda conectar.
Aconsejable cambiar de canal
Ya prácticamente todos los router de fibra vienen preparado para funcionar con el canal 2,4 GHz o 5 GHz. Esto quiere decir que podemos variar de uno a otro, siempre y cuando nuestro dispositivo sea compatible con ambos canales.
Si vemos que tenemos muchos aparatos conectados en el canal 2.4 GHz, puede ser muy buena idea que todos aquellos que puedan funcionar con 5 GHz, se conecten ahí, puesto que es un canal mucho más ágil, mucho más veloz y que puede hacer que no tengamos saturado un solo canal.
Esto puede hacer que volvamos a tener una velocidad mucho más que decente, ya que estamos siendo equitativos con la conexión.
Firewall o antivirus ralentizan la conexión
Este es otro caso que puede ocurrir y es que el firewall o el antivirus sean los responsables de la ralentización de nuestra conexión. Esto es algo que se da más en el firewall, pero en ciertas ocasiones, no muchas la verdad, el antivirus también es responsable.
Es sencillo de solucionar, tan solo nos vamos a nuestro firewall y lo desactivamos durante, por ejemplo, 15 minutos. En ese tiempo efectuamos una prueba de velocidad y si la conexión es más veloz, ya sabemos quién es el responsable. Haremos lo mismo con el antivirus.
En ese caso lo mejor es contactar con el fabricante de dicho software, comentándole el problema y esperando que nos dé una solución para no tener que desactivarlo, sobre todo si hemos pagado por dicho programa.
No sería de recibo tener un software por el que hemos desembolsado una cantidad de dinero que no nos dejase disfrutar de nuestra propia red.
Instala un repetidor para mejorar tu WiFi
Otra solución puede ser la de instalar un repetidor WiFi, sobre todo si tu problema es la perdida de señal y, por lo tanto, de velocidad en ciertas partes de la casa.
Los repetidores WiFi son dispositivos pensados inicialmente para poder ampliar el alcance de la señal inalámbrica, cuando esta no llega a todas las estancias de tu casa con la suficiente potencia o calidad a todas las habitaciones de una casa.
De este modo, al añadir el repetidor WiFi se amplía fácilmente la cobertura del WiFi del router, por ejemplo, en casas grandes, de varios pisos o con jardín o terraza, aunque también pueden servir para mejorar las prestaciones de la red WiFi aumentando su velocidad de conexión configurándolo en el llamado modo Bridge.
Un ejemplo lo tenemos en el repetidor WiFi FRITZ!Repeater 3000 del fabricante AVM. Se trata de un repetidor que, a diferencia de los routers más básicos, emite por tres bandas (dos canales en la frecuencia de 5 GHz y un canal en la frecuencia de 2,4 GHz).
Llegados a este punto, puede que se te haya ocurrido una pregunta que tiene mucho sentido: si la señal WiFi de tu router es débil, ¿de qué sirve aumentar su alcance con un repetidor? La respuesta corta es de bien poco.
Los repetidores WiFi incrementan el alcance y la estabilidad de la señal inalámbrica, pero no mejoran su velocidad o ancho de banda. Si la conexión WiFi de tu router es lenta, el WiFi del repetidor conectado a la misma red inalámbrica será igual de lento. Solamente tendrá sentido si deseas aumentar el alcance, pero no la velocidad del WiFi.
De ahí que os comentásemos que un repetidor es solamente en los casos en los que en ciertas partes de casa no tenemos buena señal.
Comprar un router nuevo
Siempre puedes probar a llamar a tu operadora y decirle si te cambia el router, pero el problema es que seguramente te volverá a poner el mismo y si el que tenías, por la razón que sea, no funcionaba bien, es poco probable que con otro igual la situación se solucione.
Por eso lo mejor sería adquirir uno nuevo y que sea de calidad, es decir, un dispositivo que permita aprovechar toda la velocidad que tienes contratada y más, para que cuando llegue más velocidad, ya estés preparado.
Seguramente muchos de tus problemas se solucionarán con alguna de las soluciones que te hemos dado, aunque si el problema persiste lo mejor es ponerse en contacto la empresa que te da el servicio y que lo vengan a mirar, ya que todo parece indicar que es algún problema interno de la propia red.