Surgió hace unos años como nicho y hoy es uno de los transportes más usados en la ciudad, por eso la Dirección General de Tráfico quiere regular su uso, ya no sólo con normas viales específicas.
El patinete eléctrico ha colonizado la urbe. Se ven de todas las marcas y lo usan todo tipo de personas. Su fácil transporte, su tamaño y su velocidad hacen que sea ideal para recorrer unos pocos km al día sin tener que coger coche o metro.
Y, como siempre pasa con los inventos que nacen de un vacío legal, el momento de regular al patinete eléctrico ha llegado.
La Dirección General de Tráfico (DGT) ha ideado una solución para regular el uso y control de este transporte, el cual actualmente no precisa de ningún documento para circular.
En forma de certificado, la DGT obligará a los usuarios del patinete eléctrico a tener dicho documento para verificar las características del vehículo.
El motivo de este certificado es evitar que los usuarios puedan llevar patinetes preparados, que exceden la velocidad máxima de 25 km/h; y combatir los accesorios no originales, como sillines o añadidos al chasis que pueden resultar peligrosos en caso de accidente.
Como si de los papeles del coche se tratase, la policía ahora podrá pararnos y exigirnos este certificado si creen que el patinete no cumple con las normas establecidas. Eso sí, en ningún caso se nos pedirá nada personal, ya que sigue sin ser necesario un carnet de conducir para manejarlos.
Los que tendrán que expedir el certificado serán los fabricantes, los cuales para poder vender en nuestro país deberán añadir este documento avalando que el patinete se ajusta al reglamento.
Toda esta información ha sido obtenida del Real Decreto 970/2020, de 10 de noviembre, por el que se modifican el Reglamento General de Circulación y el Reglamento General de Vehículos, publicado a través del Boletín General del Estado del 11 de noviembre de 2020.
A pesar que han pasado ocho meses desde la entrada en vigor del Real Decreto, el manual que regirá las nuevas características de los vehículos de movilidad personal sigue en proceso de elaboración por la DGT. De ahí que su aprobación tenga que esperar, como mínimo, hasta 2023.