El interés por los contenidos en streaming sobre videojuegos no es algo nuevo. Sin embargo, el auge de Twitch y las limitaciones de movilidad por motivos sanitarios han hecho que las retrasmisiones de juegos crecieran exponencialmente y con ellas la demanda de mejores herramientas para crear ese tipo de contenido.
Blue ha creado Yeti X World of Warcraft Edition, una edición especial de su micrófono Yeti X para streamers y creadores de contenido que respira World of Warcraft por todos sus poros.
En esencia, el Yeti X World of Warcraft Edition ofrece toda la calidad de sonido que ya encontrábamos en el modelo original, pero esta edición especial viene con algunos detalles específicos para las retransmisiones de World of Warcraft y una estética única con motivos relacionados con el juego.
| Blue Yeti X World of Warcraft Edition | |
|---|---|
| Tipo | 4 cápsulas de condensador de 14 mm |
| Dimensiones y peso | 28,9 x 12,2 x 11 cm | 1,28 Kg (soporte y micro) | 519 gr (solo micro) |
| Patrones polares | Cardioide, omnidireccional, bidireccional, estéreo |
| Respuesta en frecuencia | 20Hz – 20kHz |
| Nivel de presión sonora (SPL) | 122 dB |
| Impedancia de amplificador auriculares | 16 Ohms |
| Señal / ruido | 100 dB |
| Precio | 210 euros |
Análisis de Blue Yeti X World of Warcraft Edition:
World of Warcraft por los cuatro costados y con una presencia imponente
No es la primera vez que me pongo ante un micrófono. De hecho me pongo al menos una vez a la semana ante uno para hacer un podcast en directo que se retransmite en todas las plataformas de streaming.
Sin embargo, debo reconocer que cuando saqué el Yeti X World of Warcraft Edition de su caja me impresionó por sus imponentes dimensiones de 28,9 cm de alto y casi 1,28 Kg de peso.
Básicamente nos encontramos ante un micrófono Blue Yeti X con algunos componentes de World of Warcraft añadidos, por lo que podemos esperar unos acabados premium en todos los detalles.
El principal responsable de su peso es el soporte sobre el que viene instalado. Una pieza de metal muy robusta que evita que el micro se mueva de su posición, y cuya parte inferior se encuentra cubierta con una espuma antideslizante para proteger la mesa.
En esta base encontramos las primeras referencias al universo Wow con una fila de runas grabadas con láser decorando el borde dorado de la base.
De la base emerge un soporte decorado en un bonito color gris mate que se encargará de sostener el micrófono en su posición con dos roscas laterales que permiten ajustar su inclinación al tiempo que lo aíslan de vibraciones con dos soportes laterales de goma.
En la parte trasera de este soporte encontramos el logotipo de Blue destacado en dorado a juego con el anillo de la base.
El cuerpo casi rectangular con líneas suaves y redondeadas del micrófono también es metálico y a juego con el resto del soporte luciendo el mismo color gris con un acabado mate que resulta realmente atractivo al tacto.
En el frontal encontramos el control giratorio de ganancia que, en realidad, cumple una triple función. Con él controlamos la ganancia del audio que se ajusta para mejorar la calidad de sonido al hablar; pulsando este control se silencia el micrófono y si se mantiene pulsado un par de segundos se cambia el ajuste al control de la mezcla en la monitorización de los auriculares.
Este es un control que se va a usar bastante, por lo que nos ha sorprendido que Blue haya apostado por un control de plástico con bastante holgura, en lugar de montar uno con un tacto más sólido y que ofrezca algo más de resistencia al girar para evitar cambiar la ganancia por accidente al manipular el micrófono.
En la parte posterior encontramos el botón de selección de perfil del patrón polar que permite cambiar entre los cuatro modos de captación de la voz que admite este modelo:
- Cardioide. Es el modo perfecto para podcasting, streaming, y servicios de VoIP como Skype o Discord. Su zona de captación es frontal por lo que se potencia la voz que llega directamente aislándose del ruido de fondo.
- Patrón bidireccional. Similar al cardioide, pero en lugar de centrarse en el sonido frontal, lo amplía hacia la trasera minimizando la captación de ruido de fondo procedente de los laterales. Esto hace que sea perfecto para entrevistas y podcasts en los que el micrófono se sitúa entre los dos participantes.
- Patrón omnidireccional. Como indica su nombre, el micrófono captará todo lo que sucede a su alrededor sin focalizarse ni minimizar ningún flanco, por lo que puede ser utilizado para situarlo en el centro de una mesa en la que dialogan distintos interlocutores.
- Patrón estéreo. El micrófono separa los canales derecho e izquierdo para aportar mayor direccionalidad en el sonido, proporcionando una experiencia sonora más inmersiva en contenidos ASMR.
Te dejamos una muestra de sonido para que compruebes cómo cambian los distintos patrones polares la captación del sonido.
Justo debajo de este botón encontramos el logo de World of Warcraft, la prueba irrefutable de que nos encontramos ante un producto inspirado en el clásico MMORPG de Blizzard.
El cuerpo del micrófono se remata con un anillo en color dorado a juego con la base sirviendo de soporte para la rejilla protectora para las cápsulas con un acabado metálico oscuro a juego con el resto del micrófono.
Los componentes que relacionados con el gaming no destacan precisamente por se piezas refinadas y lo habitual es encontrar diseños llenos de luces RGB parpadeantes. En el Yeti X World of Warcraft Edition predomina un diseño elegante que incluso los no iniciados en el universo de WoW pueden apreciar.
Sin embargo, la cabra tira al monte y aquí estamos ante una pieza 100% gaming por lo que también tiene algunos detalles iluminados en RGB que pueden personalizarse.
Detalles como la escala en el índice de ganancia, que en lugar de representarse en números como era de esperar, lo hace con runas que se iluminan en verde, amarillo o rojo a medida que se va elevando el volumen de la voz y que sirven de indicador para cuando la voz corre el riesgo de saturarse.
Cuando se pulsa este botón, se ilumina un anillo rojo indicando que el micrófono está silenciado, algo muy útil durante las retransmisiones en directo, mientras que el indicador de balance de mezcla también se representa iluminando las runas.
También se iluminan los cuatro pequeños iconos que representan los patrones polares en la parte trasera. Toda esta iluminación puede personalizarse desde el software de control de Blue que veremos un poco más adelante.
Si basculamos el micrófono sobre el soporte, accedemos a los conectores del micrófono y a la rosca de sujeción para instalarlo suspendido en un brazo articulado. Es un micrófono pesado por lo que deberá tenerse en cuenta su peso al elegir un soporte suspendido.
El micrófono se conecta al ordenador mediante USB, algo especialmente conveniente ya que no necesitas ni una tarjeta de sonido ni ningún otro componente. Solo conectar y…¡a funcionar!
Nos ha sorprendido que, con la calidad que ofrece todo el micrófono, el tipo de conexión que integra en su base haya sido un microUSB y no un USB de tipo C. Incluso USB C en ambos extremos si nos ponemos exquisitos.
El cable USB que incluye tiene unos dos metros de longitud, un buen detalle que facilitará la ubicación del micro en la mesa sin que el cable imponga sus límites.
En esta misma zona encontramos el conector jack de 3,5 mm para auriculares que te permitirá monitorizar el audio del micrófono directamente.
Diversión y calidad a un solo clic
A nivel de diseño ya hemos visto que Blue se ha inspirado en el universo WoW para crear esta edición especial de su Yeti X. ¿Pero justifica este rediseño los 30 euros de diferencia que existen entre ellos?
Lo cierto es que, aunque debemos reconocer que a nivel de diseño Blue ha hecho muy bien trabajo, lo verdaderamente interesante de este Yeti X World of Warcraft Edition no lo encontramos en el micro en sí mismo, sino en las funciones de software que lo acompañan.
Basta conectar el Yeti X World of Warcraft Edition a un ordenador Windows o MacOS para poder usarlo sin más configurando los aspectos básicos del sonido desde las opciones del sistema operativo. No obstante, haciendo esto estaremos desaprovechando uno los grandes alicientes de elegir este modelo frente al Yeti X convencional.
Blue cuenta con su propio software configuración para el Yeti X World of Warcraft Edition desde el que accedemos no solo a los ajustes y distintos perfiles de sonido del micrófono, sino que también nos esperan un buen número de samples y modulaciones de voz inspiradas en los personajes que pueblan Azeroth.
Todos estos ajustes se llevan a cabo desde el software Blue Vo!ce que debe estar instalado en el equipo al que se conecte el Yeti X World of Warcraft Edition.
Sin embargo, dado que Logitech se hizo con el control de Blue en 2018, el Yeti X World of Warcraft Edition (y todos los micrófonos de Blue en general) se integran como uno más en el ecosistema de accesorios de la marca a través del software Logitech G HUB que ya integra Blue Vo!ce, facilitando mucho su configuración.
Este software transforma la experiencia de uso del Yeti X WoW Editon y lo hace a cuatro niveles: facilitando los ajustes de la calidad y ecualización del sonido, personalizando la iluminación de los distintos indicadores del micrófono, añadiendo una enorme biblioteca de samples y moduladores inspirados en World of Warcraft e integrando todo esto en el ecosistema Logitech.
Calidad de estudio para podcasters y creadores de contenido
Blue Yeti X está considerado como uno de los mejores micrófonos USB del mercado, por lo que nada indica que, dado que básicamente son los mismos componentes vayamos a tener una calidad inferior.
Hablamos de un micrófono equipado con 4 cápsulas de condensador de 14 mm que ofrecen una calidad de grabación de nivel profesional. De hecho, lo he venido usando en las últimas grabaciones del podcast de ComputerHoy 2.0.
El apartado más importante de Blue Vo!ce es Micrófono, dedicado a los ajustes de audio del micrófono, que te permitirá ajustar la ecualización de la voz. Para ello ofrece decenas de opciones que permiten reducir el ruido de fondo o minimizar el siseo, ajustar el tono o aplicar filtros.
Un buen punto de partida para este ajuste puede ser utilizar alguno de los preajustes que se incluyen, que ya vienen configurados según su propósito: Broadcaster, locutor de radio clásica, ajustes de voz o intensificación de graves.
Te dejamos una muestra de cómo suena el Yeti X World of Warcraft Edition con Blue Vo!ce apagado y encendido para que veas la diferencia, así como muestras de algunos modos de ajuste predefinidos.
Poco que contar en el apartado Iluminación, desde el que se personaliza la iluminación de los indicadores RGB del micrófono. No solo permite cambiar el color del indicador, sino también aplicar efectos de animación.
Blue ha conseguido que toda esta personalización se lleve a cabo de una forma sencilla y muy visual, gracias a la vista previa en vivo que te muestra qué aspecto tendrá el micrófono con la nueva configuración.
Sin duda alguna el apartado en el que más nos hemos divertido ha sido Muestreador, que permite modificar la voz para dar vida a algunos personajes que pueblan el universo de Azeroth.
Te dejamos una muestra con las modulaciones de voz que encarnan a distintos personajes de World of Warcraft.
Este apartado también incluye distintos samples de frases míticas del juego en voz de sus protagonistas y con las voces en distintos idiomas, de forma que pueden insertarse en los streamings.
Además de las voces, Blue Vo!ce incluye el sonido ambiente de distintos lugares de Azeroth.
Otro aporte importante que revela que este Yeti X World of Warcraft Edition es una herramienta muy orientada a los creadores de contenido y streamers, es la integración de distintas voces y expresiones, como saludos, exclamaciones o efectos especiales relacionados o no con el juego, que pueden vincularse con las teclas G de los teclados Logitech.
Esta integración simplifica el uso de estos efectos desde el resto de componentes del escritorio haciendo que sea más fácil e inmediato utilizarlos en los streamings sin tener que acudir a la sección adecuada del programa para activarlo.
Por fuera es todo juego y diversión, pero por dentro es un profesional
Llegamos al final de este análisis confesando que hemos disfrutado como niños jugando con la modulación de voces y emulando a los personajes de la saga.
Blue ha hecho un buen trabajo con el software para dar un valor añadido a esta edición especial World of Warcraft, que sin duda marcará la diferencia entre optar por el Yeti X “estándar” o por esta versión ambientada en el clásico MMORPG de Blizzard.
La calidad de sonido característica de Blue se mantiene inalterable y a unos niveles muy altos. Es una excelente herramienta para crear podcast y hacer directos en Twitch.
A pesar de que su estética está muy definida por las runas los motivos del juego de Blizzard, el micrófono encaja en cualquier setup tanto si las retransmisiones tratan sobre una temática gamer como si es de cualquier otra.
El hecho de utilizar USB en lugar de jack de audio simplifica la conectividad, y poder monitorizar el audio del micro hace más sencilla su configuración.
Sin duda alguna, los 210 euros que cuesta este micrófono es una razón de peso para considerar su compra, pero la calidad y las prestaciones que ofrece este Yeti X World of Warcraft Edition lo convierten en casi una pieza de coleccionista que, además, puede usarse en el día y crear un contenido más divertido para las transmisiones en streaming.