¿Es legal avisar de un radar? La DGT responde a una de las cuestiones que más dudas genera entre los conductores y aclara todos los matices.
Gracias a la tecnología, desde hace unos años los conductores pueden saber el punto exacto en el que se encuentran todos los radares de las carreteras españolas. Y no solo eso: aparte de aplicaciones que nos avisan de la situación de los cinemómetros, también hay dispositivos capaces de rastrear y localizar los radares próximos, e incluso hay aparatos que pueden anular su funcionamiento.
Pero el hecho de que la tecnología permita llevar a cabo todas estas acciones no significa que sea legal realizarlas. Como algunas de estas prácticas son ilegales y otras sí que está permitido hacerlas, son muchos los conductores que están confundidos y no saben muy bien si es legal avisar de la presencia de un radar o no.
Para resolver estas dudas, la Dirección General de Tráfico explica qué es lo que está permitido hacer y qué no a través de su revista, en un reportaje en el que deja claro las multas que te pueden caer en caso de infringir las normas relacionadas con los radares.
Tal como explica la DGT, lo único que está permitido hacer es avisar de la presencia de los radares fijos. Esto es así porque se trata de información de dominio público que cualquier persona puede consultar a través de la página web de la DGT. Por lo tanto, es legal usar una app como Google Maps, Waze u otra que nos indica dónde están los radares fijos.
El caso de los radares móviles es diferente. Tráfico comparte los tramos de carretera en los que se suelen situar los controles de velocidad, pero no detalla el punto kilométrico exacto. Lo que esto significa es que revelar la posición exacta de un control de velocidad móvil es ilegal.
Además, la DGT también aclara qué dispositivos se pueden utilizar en el vehículo y cuáles no. Por un lado están los avisadores, que son tanto las aplicaciones que indican los puntos de los radares fijos como los GPS que incluyen un sistema de aviso para estos cinemómetros. Los avisadores son completamente legales, así que no tienes nada que temer si los usas.
Por otra parte están los detectores, unos dispositivos que rastrean y localizan los radares que hay en las inmediaciones. Su uso está totalmente prohibido y se considera una infracción grave, sancionada con 200 euros de multa y la retirada de 3 puntos del carné.
En tercer lugar están los inhibidores, capaces de rastrear y anular la función de los cinemómetros. También es un dispositivo ilegal y su uso se sanciona con multas de hasta 6.000 euros y la retirada de 6 puntos del carné. Además, el taller que lo instale puede ser sancionado con hasta 30.000 euros.