En el terreno de las comunicaciones inalámbricas estamos viendo algo similar a lo que ocurre en otros segmentos. Y es que, el propio desarrollo y los avances se producen a un ritmo mayor al que adoptamos dichas mejoras, bien por la extensión de las mismas o por su precio.
Llevamos años hablando del 5G y sus ventajas, algo que mejorará no solo la comunicación móvil y el acceso a internet, sino que beneficiará a industrias como el desarrollo de los vehículos autónomos, la inteligencia artificial o la medicina.
Las principales ventajas del 5G son el ancho de banda y velocidad, así como la latencia, mucho menor que la de la red 4G+. El 6G, sin embargo, tendrá una latencia que dejará en el pasado la medida de los milisegundos. Es, según Samsung, el momento de dar la bienvenida a los microsegundos.
La latencia es el tiempo que tardan dos o más sistemas en comunicarse. Es algo que vemos en la tecnología inalámbrica y también en otros sistemas, como en monitores, mandos de juego y cualquier dispositivo que se comunique con otro. Esa comunicación no es instantánea y hay una latencia.
En la comunicación inalámbrica, la latencia es independiente de la velocidad. Suelen ir unidas y, si tenemos una gran velocidad, seguramente tengamos una latencia mínima, pero podemos tener una alta velocidad y una latencia algo menor que repercute en la sensación de recibir paquetes de datos en tiempo real, ya que notamos que… bueno, que van con algo de retraso o ‘lag’.
Samsung acaba de publicar un documento en el que detallan las mejoras del 6G y, según los surcoreanos, tendremos evidentes mejoras en todos y cada uno de los escenarios. El 6G consumirá menos recursos energéticos, pero también será 10 veces más rápido, tendrá una latencia muchísimo menor por aire, un mayor alcance y, además, será más estable, permitiendo tener más dispositivos conectados.
Los surcoreanos hablan de picos de 1.000 Gbps y una latencia de 100 microsegundos, 50 veces menor que la latencia del 5G.
Los usos futuristas del 6G
Más allá de las evidentes mejoras en velocidad y latencia… ¿para qué querríamos utilizar el 6G? Es decir, ¿necesitamos más velocidad? La respuesta es que, a nivel individual, cuanta más velocidad de conexión a la red mejor, pero además las ventajas en latencia se pueden utilizar en otros ámbitos.
Según Samsung, algunos de los usos de la red 6G será el de crear experiencias de realidad aumentada más inmersivas, réplicas digitales en tiempo real y los «ansiados» hologramas que hemos visto en obras de ficción y que ahora hacemos con una lámpara LED programable que gira a toda velocidad.
El 6G se va a 2028… como mínimo
Está claro que, como amantes de la tecnología, debemos esperar grandes cosas del 6G… y lo haremos con ilusión, pero debemos tener los pies en la tierra. Como decíamos hace unos párrafos, el 5G iba a ser una realidad hace años y en España aún no se ha implantado de manera masiva.
Samsung fecha 2028 como año para la implantación del 6G con 2030 como año en el que usaremos la tecnología de forma masiva. Veremos si se cumplen estas previsiones que, por otro lado, no es la primera vez que se hacen.
Y seguro que al 6G le tocará lidiar con los que piensan que el 5G produce radiación perniciosa, aunque ese es otro tema…