¿Estás haciendo limpieza y los rieles de las ventanas se te resisten? Toma nota de estos trucos para dejarlos impecables de una forma fácil y sencilla.
Limpiar las ventanas es una tarea muy pesada que a nadie le gusta hacer. Habitualmente prestamos atención únicamente a los cristales, pero hay otros elementos que acumulan mucha suciedad y que tenemos que mantener limpios si queremos que las ventanas funcionen adecuadamente.
Hace unas semanas ya te dimos algunos trucos para limpiar los cristales de las ventanas, pero hoy nos vamos a centrar en uno de esos elementos que afectan al buen funcionamiento de las ventanas. Hablamos de los rieles, el espacio interno de la estructura de la ventana.
Mantener limpios los rieles es especialmente importante en el caso de las ventanas correderas. Esto es debido a que, si hay mucha suciedad acumulada, la hoja de la ventana no se deslizará bien, complicando su apertura y cierre.
Si tus ventanas no son correderas, también hay que mantener limpio este espacio, ya que si hay demasiada suciedad puede impedir que se cierre correctamente.
Pero, ¿cómo limpiar los rieles de las ventanas? Al tratarse de un espacio muy estrecho no resulta sencillo deshacerse de la suciedad. Si pasas el cepillo convencional siempre quedan restos de suciedad, y si tu aspiradora no es demasiado potente tampoco te ofrecerá buenos resultados.
Para eliminar la suciedad por completo lo que tienes que hacer es utilizar la herramienta adecuada. Tiene que ser un cepillo pequeño apto para moverse por esta cavidad sin problema, y hay que procurar que no sea demasiado abrasivo para que no arañe el metal o la madera del marco.
Puedes usar un cepillo de dientes suave y ayudarte de bastoncillos en las zonas más estrechas. También hay productos especialmente diseñados para esta tarea, como este kit de cepillos de ranuras que cuesta 7,99 euros en Amazon.
Una vez que tengas las herramientas adecuadas, toma nota de estos trucos para limpiar los carriles de las ventanas y eliminar toda la suciedad fácilmente:
- Agua tibia y jabón lavavajillas. Una de las soluciones más sencillas para deshacerte de la mugre es el agua y el jabón. Tras retirar las pelusas y partículas grandes de suciedad, pon agua tibia en un barreño, añade un poco de jabón lavavajillas y aplica la mezcla en el riel. Frota con un cepillo y pasa papel de cocina o un trapo para retirar los restos.
- Vinagre blanco y bicarbonato de sodio. Después de aspirar el riel y retirar con el cepillo las partículas más grandes, puedes eliminar la suciedad incrustada fácilmente mezclando vinagre blanco y bicarbonato de sodio. Espolvorea un par de cucharadas de bicarbonato y luego vierte un poco de vinagre para que se forme espuma. Después, frota con el cepillo y retira los restos de suciedad con una toalla de papel.
- Agua oxigenada. El agua oxigenada es muy efectiva para eliminar el moho de las ventanas. Aplica una pequeña cantidad en los rieles, deja que actúe y luego frota con un cepillo para conseguir un resultado impecable.
- Amoniaco. Si la suciedad está muy incrustada y no consigues quitarla, el amoniaco es tu mejor aliado. Aplícalo, frota con un cepillo y verás cómo salen incluso las manchas más difíciles.