Por culpa de la crisis de los semiconductores, algunos compradores de Mercedes tendrán que esperar más de un año para recibir su coche, según el CEO de la compañía.
La crisis de los microchips está impactando en muchos fabricantes de automóviles. Pero parece que lo está haciendo con especial virulencia en los del mercado premium. De hecho, Daimler acaba de revelar un dato que no gustará demasiado a aquellos que estén pensando comprarse uno de sus modelos.
Y es que algunos clientes de Mercedes tendrán que esperar más de un año por su coche. Algo que habla por sí solo sobre lo complicada que es la coyuntura.
Ha sido el propio CEO del grupo, Ola Kallenius, quien lo ha comunicado en una entrevista publicada recientemente por el periódico alemán Frankfurter Allgemeine. En ella, ha reiterado algunos de los comentarios que ya había hecho con anterioridad acerca de la gran influencia que sobre ellos está teniendo la escasez de semiconductores.
«La demanda es enorme y, por desgracia, al mismo tiempo está habiendo severas limitaciones», apunta Kallenius en la entrevista, según recoge Reuters. «Para algunos modelos, los tiempos de espera son mucho más largos de lo que querríamos; en algunos casos, de más de un año«, concluye, sin entrar en detalle sobre cuáles son los que más problemas están registrando.
Hace unas semanas, el propio ‘jefe’ de Mercedes ya alertó, durante el Salón del Automóvil de Múnich, de que la crisis de los microchips podría continuar hasta 2023. «Varios proveedores han aludido a problemas estructurales con la demanda. Y eso podría influir en todo el año 2022, y que la situación empiece a relajarse en el siguiente«, pronosticó entonces.
Además, oficialmente, Daimler ha rebajado sus previsiones de ventas para el tercer trimestre de este 2021, también a causa de este fenómeno. Aunque, eso sí, espera empezar a recuperar los niveles a partir del último trimestre.
Sin embargo, declaraciones como las de Kallenius en la prensa podrían llevar a muchos a pensarse dos veces embarcarse en la compra de un Mercedes. Sobre todo, sabiendo que tendrán que esperar más de un año, al menos en ciertos casos, para disfrutar de él.
Este artículo fue publicado en Autobild por Iván Fombella.