Cecotec Cafelizzia 790 Steel Pro, análisis y opinión | Tecnología

El fabricante español de electrodomésticos Cecotec ha conseguido hacerse un hueco entre las marcas más vendidas en un tiempo récord. En poco más de dos años sus productos se han extendido por los principales e-commerce y retailers de todo el país ocupando las listas de más vendidos en muchas de sus categorías.

Hoy analizamos la que seguramente sea la cafetera más vendida en Amazon España, se trata de la Cecotec Cafelizzia 790 Steel Pro, una cafetera express de tipo manual con vaporizador con más de 1500 valoraciones en la plataforma, la mayoría de ellas muy positivas. 


Desde el siglo XV consumimos el café tostado y molido. Si quieres seguir siendo fiel a la tradición, nada mejor que prepararlo tú mismo en casa. Cafeteras de goteo o las modernas cafeteras de cápsulas, ¿cuál prefieres?

Por menos de 100 euros, incluso menos si encuentras una buena oferta, cuenta con muchas de las prestaciones de modelos mucho más caros como la De’longhi Dedica, una de las cafeteras expresso más apreciadas en este segmento de producto y que claramente ha servido de inspiración para la cafetera de la marca española Cecotec. 

  Cecotec Cafelizzia 790 Steel Pro
Potencia 1.350 W
Dimensiones 33,6 x 37,6 x 40,6 cm
Presión de funcionamiento 20 bares
Capacidad depósito 1,2 litros
Accesorios Filtro para un café, filtro para dos cafés y cuchara
Manómetro
Vaporizador
Bandeja portatazas Sí, con función calentador
Función para agua caliente Sí, perfecto para infusiones
Precio 99,90 euros

¿Merece la pena o es mejor pagar un poco más? Te lo contamos en este análisis de la Cafelizzia 790 Steel Pro de Cecotec.

Análisis de la cafetera express Cecotec Cafelizzia 790 Steel Pro por apartados:

Una cafetera bonita que engaña a la vista

Para que no te vuelvas loco es importante indicar que podrás encontrar varias versiones de esta cafetera que se diferencian entre sí por pequeños detalles, aunque el producto base y las prestaciones principales son exactamente las mismas.

El modelo que hemos llevado a análisis es el Cafelizzia 790 Steel Pro, con manómetro y acabado en acero, esta misma versiónestña disponible en color negro, blanco y rojo.

Existe además otra versión disponible en estos mismos cuatro acabados, Cecotec Cafelizzia 790 cuya única diferencia es la ausencia de manómetro. Tras el análisis te podemos adelantar que es una prestación irrelevante, más estética que otra cosa, por lo que si la diferencia de precio es apreciable te aseguramos que no merece la pena pagar más.

Por otro lado puedes encontrar las Cecotec Cafelizzia 790 Shiny y Shiny Pro, dos modelos con los mismos acabados y prestaciones que únicamente parecen diferenciarse en el nombre y que no logro entender muy bien.

El montaje y puesta en marcha de la cafetera no podría ser más sencillo, ya que no cuenta con excesivas partes móviles más allá de la bandeja para recorrer los posibles derrames, el depósito de agua de 1,2 litros y el brazo con los filtros presurizados intercambiables para una o dos tazas de café, además incluso una cuchara medidora para el café con base plana para poder completarlo.


Buena parte de la factura de la luz proviene de los electrodomésticos que usamos a lo largo del día. Si optimizamos su consumo, podemos ahorrarnos mucho dinero al mes. Vamos a ver algunos trucos para reducir el gasto en la factura de la luz, a través de los electrodomésticos.

Salvo el brazo y los filtros el resto de elemento llegan ya montados en la cafetera por lo que solo hay que quitar algunos plásticos tras sacarla de la caja para que esté lista para funcionar. 

Tengo que reconocer que estéticamente es muy bonita y mucho más pequeña y compacta de lo que esperaba: 33 centímetros de largo, 14 centímetros de ancho, una altura de 30,4 centímetros y un peso de unos 3,5 kilos, por lo que no ocupa excesivo espacio en la encimera y resulta fácil de mover.

 

 

Comparada con la De’longhi Dedica es mucho más frágil, y es que aunque los acabados son metálicos lo que prevalece en general es el plástico. En este aspecto hay dos zonas que me parecen especialmente críticas y con las que hay que tener bastante cuidado para no tener problemas.

El primero es el depósito del agua, está fabricado en plástico rígido que no transmite mucha confianza ante los golpes accidentales. Por suerte cuenta con una tapa en la parte superior que permite rellenarlo sin tener que moverlo, que es lo que yo recomendaría hacer para evitar, por ejemplo, un golpe involuntario con el fregadero. 

El otro punto delicado se encuentra a la hora de colocar el brazo en la cafetera, la pieza de enganche es de plástico y debido a la presión y el roce del giro podría desgastarse con rapidez, por lo que conviene tener cuidado a la hora de preparar el café si no queremos tener problemas en el futuro.

El cable de conexión a la red eléctrica tiene una longitud de 75 centímetros y no cuenta con ningún sistema para poder ocultarse en el interior de la cafetera.

En la parte superior encontramos la superficie calienta tazas, alcanza una temperatura de unos 40 grados y no tenemos ningún control sobre la misma, no solo no podemos ajustar la temperatura, tampoco hay opción de apagarla. La realidad es que, en mi opinión, su única utilidad es la de rellenar una línea en la hoja de especificaciones ya que serían necesarias horas encima de esta superficie para que una taza adquiriera algo de temperatura.

En la parte superior frontal están los botones de encendido y apagado, activar y desactivar el utensilio para el vapor y los botones para una o dos tazas de café. En el lateral derecho encontramos una rueda de un cuarto de giro, bastante frágil, para activar la salida del vapor o agua caliente. Esta se encuentra un poco más abajo y es orientable, aunque solo en la plano horizontal, lo que como comentaremos más adelante resulta algo incómodo.

¿Café solo o con leche?

La Cecotec Cafelizzia 790 Steel Pro dispone de un bloque térmico capaz de alcanzar los 20 bares de presión, con una potencia de trabajo de 1350W y un sistema de calentamiento rápido Thermoblock. Esto permite que la cafetera esté lista para usar en unos 40 segundos estando la cafetera completamente fría, lo que no está nada mal. Lo sabrás porque las luces de los botones se quedan fijas. 

Preparar café es realmente sencillo, solo hay que elegir el filtro, según queramos preparar una o dos tazas de café, rellenarlo con unos 7 gramos de café molido por taza, prensarlo ligeramente con la ayuda de la cuchara medido y colocarlo en la cafetera con cuidado realizando un pequeño giro hacia la derecha.

Según el fabricante la Cecotec Cafelizzia 790 Steel Pro no es compatible con monodosis tipo ESE aunque son muchos los usuarios que indican lo contrario. Yo he realizado la prueba con las monodosis de Mercadona y el resultado deja bastante que desear, tal vez un mejor café o el uso de un anillo adaptador puedan mejorar el resultado.

Dependiendo de la cantidad de café, ajustar el brazo nos costará más o menos, si nos pasamos rellenando el filtro no tendremos suficiente holgura y resulta complicado realizar el giro. Aunque las patas traseras disponen de pequeñas ventosas no son excesivamente fuertes la máquina se vence con facilidad si hacemos mucha presión por lo conviente tener cuidado. Conforme vayas haciendo más cafés irás precisando mejor la cantidad exacta de café molido que debes introducir en el filtro para que el brazo entre con facilidad.

Una vez colocado el brazo solo hay que seleccionar el número de tazas. Si seleccionamos dos tazas la bomba continuará funcionando durante más tiempo y saldrá más café. La cantidad de café por defecto me ha parecido adecuada para mi gusto, unos 25 ml por taza. 

Pero si te gusta el café más corto y concentrado o más largo y aguado, los tiempos de cada botón se pueden ajustar por separado, solo hay que dejarlos presionados y soltar cuando hayamos obtenido la cantidad deseada y el tiempo quedará memorizado para las siguientes ocasiones. De igual forma es posible parar la extracción de café en cualquier momento volviendo a presionar el botón.

Indicar que el brazo siempre sacará café por sus dos orificios, si queremos dos tazas únicamente hay que colocarlas una al lado de la otra haciéndolas coincidir con cada una de las salidas. En las pruebas la cantidad de café para cada una de las tazas fue muy equilibrada, llenándose casi por igual.

Con el brazo colocado la altura para tazas y vasos es de unos 11 centímetros, y puede incluso ampliarse hasta los 14 centímetros quitando la bandeja, hueco más que suficiente  para la mayoría de menaje que tengas por casa.

El mayor inconveniente de este tipo de cafeteras espresso manuales es la limpieza, después de cada café hay que sacar el filtro y limpiarlo, y al contrario que en los bares no podemos hacerlo mediante golpes. 

El brazo es bastante frágil, para ahorrar costes la parte del mango es íntegramente de plástico por lo que no me fiaría mucho de maltratarlo. Además al no estar unido el filtro al brazo hay que retirarlo con las manos y sacarlo manualmente, con la complicación de que si el café está muy prensado no sale con facilidad. Es un proceso un tanto sucio y si tenemos que hacer muchos cafés seguidos también bastante tedioso.

Si activamos la rueda de la derecha con el modo cafetera activo conseguiremos que por el vaporizador salga agua caliente para preparar infusiones. Esto no queda muy claro en el manual de instrucciones, por lo que es interesante advertirlo para que nadie se vuelva loco.


¿Eres fan de los aparatos SilverCrest? Si la respuesta es afirmativa, seguro que te gustaría saber quién fabrica los electrodomésticos de Lidl. 

La temperatura del agua caliente es de alrededor de los 70 grados, salvo para ciertos tipos de té es una temperatura un tanto baja para la gran mayoría de infusiones que recomiendan entre 80 a 100 grados. Llegado a este punto puedes tirar de 30 segundos de microondas o recurrir a la manga de vapor o panarello para lograr la temperatura ideal.

Un capuchino de primera

Una vez que tengamos el café es el momento de activar el vaporizador para calentar la leche y espumar, si es que no lo quieres café solo. Ojo, es importante seguir este orden: primero hacer los cafés y luego calentar la leche, porque el cambio del modo vapor a volver a hacer café da bastantes problemas. 

El uso de la manga de vapor sobrecalienta mucho la cafetera, lo que provoca que volver al modo para preparar cafés se pueda dilatar varios minutos, incluso en mi caso ha llegado a quedarse colgada en varias ocasiones. Si no te queda más remedio, un pequeño “truco” para acelerar el proceso de enfriamiento es activar la salida de agua caliente.

Para activar el vaporizador solo hay que pulsar el botón vapor que se quedará fijo en unos 20 segundos. Para calentar y espumar la leche cuenta con un pequeño tubo donde se inserta una pequeña asa de plástico y un tubo metálico de 6 centímetros que lo prolonga hasta el interior del recipiente, y que es el que entra en contacto con la leche o el agua.

Como ya indica al principio el gran problema del tubo de vapor es el escaso margen de maniobra, al solo poderlo mover en horizontal, y no en vertical, la distancia máxima del extremo del tubo a la superficie es de solo 9 centímetros por lo que si queremos calentar mucha leche de una vez haya que retirar el tubo para ganar algo de margen, lo que resulta un poco farragoso.

Al margen de esto el vaporizador funciona muy bien, es algo lento a la hora de calentar, pero no se puede pedir mucho más. La espuma es fantástica y permite hacer unos capuchinos de apariencia realmente profesional. 

Siempre que utilices por primera vez el vaporizador escupe una pequeña cantidad de agua residual de anteriores usos, por lo que te recomiendo poner previamente un recipiente vacío para retirar ese agua antes de poner la jarra de leche.

Un manómetro púramente decorativo

Como te habrás dado cuenta no he hablado ninguna vez, salvo al principio, del manómetro. Este elemento solo está disponible en los modelos Pro y se supone que sirve para indicar la presión de la caldera. 

Durante el uso de la cafetera su funcionamiento ha sido bastante errático, con subidas y bajadas de la manecilla sin ninguna justificación aparente, una manecilla que jamás ha subido por encima del 50% de la presión máxima. Además el manómetro de esta Cecotec Cafelizzia 790 Steel Pro parte de un error evidente: no tiene indicados en la esfera las unidades de medición, por lo que simplemente no vale para nada.

Una cafetera para momentos puntuales

El resultado es un café intenso, concentrado y con mucho cuerpo, aunque en la mayoría de ocasiones con más espuma que crema. Aunque esto depende mucho de la calidad del café y del grosor de la molienda. 

Se notan los 20 bares de presión y el resultado es muy superior al de las cafeteras de cápsulas tipo Nespresso sobre todo en lo que intensidad y cuerpo se refiere, no hay color, el café está mucho más rico e incluso no desmerece con respecto al de muchos bares.

Además tenemos la ventaja de poder elegir el tipo de café y utilizar café recién molido si disponemos de un molinillo de café, un complemento indispensable si adquieres una cafetera de este tipo.

Es una cafetera perfecta para aquellos que gustan de disfrutar de un buen café de forma puntual, las mañanas de los fines de semana o al llegar a casa del trabajo, pero no creo que sea una opción si tomas muchos cafés al día, pueden hacerlo claro está, pero el proceso es demasiado farragoso y estoy seguro de que terminarías cansándome. Tampoco tengo claro que la cafetera pueda aguantar un ritmo excesivamente alto de funcionamiento.

Deja un comentario