Hoy en día es bastante común encontrar paredes de escalada de unos pocos metros en gimnasios, superficies comerciales, centros de ocio, etc. Pero ninguna se puede comparar a CopenHill, la pared de escalada más alta del mundo.
Ha sido construida en Copenhague, en Dinamarca. Son 80 metros de subida en una zona en donde hace bastante viento. Es tan peligroso, que aunque fue terminada en noviembre no se ha abierto hasta primavera, en donde el tiempo es más benévolo. Y no permanecerá abierta todo el año.
Quizá te llame la atención en la foto de apertura, que la pared de escalada esté colocada en un edificio con una enorme chimenea. Esto es porque se trata de una planta de reciclaje. Sus dueños querian darle otra utilidad al edificio, y por eso aprobaron la construcción de la pared de escalada más alta del mundo.
El diseño y construcción ha corrido a cargo de Walltopia, una firma de arquitectos especializada en este tipo de edificaciones.
No ha sido sencillo, porque no se trataba solo de diseñar la pared, sino que además encajara en el estilo arquitectónico de la planta energética.
Debido a los fuertes vientos de la zona la estructura está hecha de acero inoxidable, y para crear la pared se ha utilizado plexiglass y fibra de vídrio, que son materiales que resisten bien las inclemencias del tiempo.
En total la pared tiene una superficie de 1.200 metros cuadrados, y ha sido fabricada con 55 toneladas de acero inoxidable búlgaro, y 24 toneladas de plexiglass y fibra de vidrio.
Desde un punto de vista técnico está dividida en cuatro partes, y en cada una de ella los escaladores puedes descansar un poco, al ofrecer aristas sobre las que poder apoyarse. Se han diseñado varios caminos para subir, unos más difíciles que otros.
Si hace mal tiempo es más complicado el principio que el final, ya que abajo hay más cuerda y el viento la mueve con fuerza.
Desde esta primavera ya está abierta al público, y seguro que se convierte en un lugar de peregrinaje para los fans de este exigente deporte.