Muchas familias viven en casas de dos plantas, o tienen un pequeño rellano con alguna escalera en la entrada, el patio, etc. Como nos ocurre a nosotros, a medida que se hacen mayores a los perros o gatos les cuesta cada vez más subir las escaleras. Esto es un problema si su comedero o su cama están arriba. Es lo que le ocurría a una instagramer llamada Sonya Karimi, así que ideó una solución: un ascensor de madera para perros.
Sonya es una teraupeuta de Nueva Orleans, en Estados Unidos, que tiene cuatro perros: George de 13 años, Bodhi y Sam de 10 años, y el más joven, Emery de 4 años. Hace unos meses adoptó a Emery, que tiene un problema en el ligamento de una pata que le impide andar bien, y no puede subir escaleras. Sus otros tres perros ya pueden considerarse ancianos, y les cuesta mucho subir las largas escaleras a la segunda planta.
Aprovechando el confinamiento, a Sonya se le ocurrió construir un ascensor de madera para sus perros, de forma artesanal. Tras tres meses de trabajo, ayudada por su pareja, construyó este bonito ascensor: El Doggie-vator.
Como vemos en el vídeo y en las fotos que lo acompañan, lo perros llegan al ascensor por una pequeña rampa en la planta baja, o directamente en la planta alta.
Allí se meten en un caja de madera motorizada, con un pequeño motor que sube o baja el ascensor, accionado por uno de sus dueños.
Sonya pensaba que tendría que entrenar a sus perros para que se acostumbrasen a usarlo. Pero, para su sorpresa, no ha sido así. Desde el momento en que lo vieron, ya no quieren subir andando las escaleras.
Incluso si no hay un humano cerca de la puerta del ascensor, esperan pacientemente delante de ella cuando quieren subir o bajar, hasta que uno de sus dueños acude a accionar el botón. Hasta Emery, que es un perro joven, lo usa a menudo.
Como los humanos, los animales también se acostumbran rápido a la buena vida…
Si quieres saber más sobre este curioso ascensor para perros, echa un vistazo a la cuenta de Instagram de Sonya Karimi.