El límite de velocidad en autovías y autopistas en España, está fijado en 120 Km/h. Y por lo que parece, podría convertirse en uno de los más altos de Europa. Tanto Francia como Holanda están aprobando leyes para reducir el límite de velocidad en autopistas. Como dice el viejo refrán, cuando las barbas de tu vecino veas cortar…
Según nos cuenta Susana Viñuela de Auto Bild, el pasado mes de marzo Holanda aprobó la reducción del límite de velocidad en autopista de los 130 a los 100 Km/h. Mientras, Francia se ha propuesto bajar de los 130 a los 110 Km/h, tal como explica Enrique Trillo en TopGear. Son reducciones muy importantes, que tendrán un gran impacto en los conductores. ¿Deberíamos hacer lo mismo en España?
Al contrario que los recortes en carretera, en esta ocasión no se debe a un intento de reducir los accidentes mortales, ya que la siniestralidad en autopista es baja, y el 80% de los accidentes mortales se producen en carreteras. En este caso, el recorte del límite de velocidad se debe a la alta contaminación.
Cuando el ministro de transporte holandés anunció el hachazo al límite de velocidad, reconoció que «es una medida que me duele mucho, aunque de otro modo el país se paralizará con riesgo de pérdida de empleos«. Y es que la alta contaminación obliga a cerrar al tráfico los centros de las ciudades, y esto perjudica a comercios y empresas. Por no hablar de las hospitalizaciones y fallecimientos directamente relacionados con la contaminación.
Y aunque es cierto que la mayoría de las autopistas están fuera de la ciudades, otras se usan como circunvalación, como ocurre con la M-30, y la contaminación de sus coches llega a la ciudad.
Está demostrado que los coches contaminan más cuando circulan a más de 90 Km/h, en proporción a la velocidad, así que cualquier reducción de velocidad por encima de los 90 Km/h va a suponer reducir la contaminación por óxido de nitrógeno (NOx).
Un informe de la Universidad Politécnica de Madrid de junio de 2013 demostró la reducción de contaminación en una simulación efectuada durante diez días en la que se restringió un 50% el tráfico en el interior de la M-30. Los niveles de emisión de óxidos de nitrógeno (NOx) se redujeron un 7,7%. También se observó un descenso del 12% en la concentración de NO₂ en la ciudad y de hasta un 45% en el interior de la M-30.
¿Deberíamos reducir la velocidad en autopista a 110 Km/h en España? Top Gear ha preguntado a varios expertos. Mario Arnaldo, presidente de Automovilistas Europeos Asociados (AEA), cree que hay que hacer un uso más eficiente de las carreteras, pero opina que es más eficaz «actualizar el parque móvil y trazar un plan realista de renovación«.
Ramón Ledesma, asesor de Pons Seguridad Vial explica que «una reducción generalizada y masiva de la velocidad en contra de la población puede no sólo hacer fracasar la medida en el momento en que se aplica, sino su puesta en marcha en las próximas décadas«.
¿Acaso no es suficiente argumento reducir la contaminación, que mata a miles de personas todos los años y contribuye al calentamiento global y a la desaparición de especies animales y vegetales?