Reino Unido prohibirá los coches de combustión en 2030 | Motor

Reino Unido valora fijar dentro de 10 años el final de los coches de combustión en el país, pero no será tarea sencilla.

Y por combustión en Reino Unido entienden gasolina, diésel, híbridos, híbridos enchufables y gas. Se han propuesto un ambicioso plan que pasa por recortar los plazos iniciales para finiquitar la venta de vehículos impulsados por motores de combustión interna. ¿Cuánto? Diez años. Y es que todo apunta a que Reino Unido se planea prohibir los coches de combustión en 2030.

Según ha informado Autocar, al gobierno británico le gustaría cumplir su promesa mucho antes de lo previsto. Algo que se desprende de las palabras de su Ministro de Trabajo, Matthew Pennycook: Sabemos que hemos puesto sobre la mesa una fecha ambiciosa para eliminar gradualmente la venta de estos coches, pero es alcanzable. Es un plazo que daría una nueva vida a la industria automotriz de Gran Bretaña mientras combatimos el cambio climático y limpiamos el aire”.

Todos los involucrados en el sector del motor británico observan con recelo esta nueva postura. Y es que, según los implicados, para acelerar el proceso de esta manera es necesario que el gobierno británico diseñe un plan real para lograrlo. Desde su punto de vista sería necesaria una reducción de emisiones dentro de la industria, creación de empleos y garantizar los apoyos necesarios para que se llevase a cabo esa transición hacia un escenario limpio.

 

Las ventas

A pesar de las reticencias de la industria, las ventas acompañan la determinación de Reino Unido: las ventas de coches eléctricos e híbridos han superado a las de los vehículos diésel. Desde abril hasta junio de este año se han matriculado 33.000 modelos eco y cero emisiones frente a los 29.900 de gasóleo que se vendieron. Un indicador que sustenta la tendencia entre los conductores británicos: están dispuestos a dejar atrás los motores de combustión interna.

 

¿Qué pasará con los modelos de gasolina, diésel, gas, híbridos e híbridos enchufables? En un principio, la prohibición sólo se aplicará a los coches nuevos. Todos aquellos británicos que tengan un vehículo de combustión podrán seguir moviéndose con él. Otra cosa serán los impuestos, tasas o peajes que el gobierno británico establezca para estos coches.

Primero 2040, luego 2035

Los planes iniciales de Gran Bretaña pasaban por prohibir la venta de este tipo de vehículos en 2040, una fecha que se les antojaba lejana a tenor de los hechos. Después de establecer esta meta, propusieron una transición más rápida que llevase a la industria británica a despedirse de los coches de combustión en 2035. Una vez más parece que las previsiones no les han parecido suficiente y han optado por un nuevo recorte que, si no hay más cambios, se hará realidad dentro de una década.

Este artículo fue publicado en Autobild por Elena Sanz Bartolomé.

Deja un comentario