Encuentran un kit de tatuajes de hace 3.600 años | Life

Investigadores han descubierto el kit de tatuajes más antiguo del mundo hasta la fecha: una colección de 3.600 años que incluye huesos de pavo puntiagudos, conchas manchadas de tinta y herramientas de piedra encontradas en una tumba de nativos americanos en el condado de Williamson, Tennessee.

Ahora se ha dado un paso más en la reconstrucción de la historia de los tatuajes ya que, si bien se habían encontrado numerosas momias antiguas con la piel entintada, era muy extraño que los arqueólogos encontrasen las herramientas destinadas a tal fin. Recientemente ha sido hallado un completo kit para tatuar, ubicado en una tumba de nativos americanos en el condado de Williamson, Tennessee, y que tendría alrededor de 3.600 años de antigüedad. Al comienzo desdeñaron ese uso y se pensó que era un conjunto sagrado para fines rituales.

Las herramientas incluían huesos de pavo puntiagudos, conchas manchadas de tinta y herramientas de piedra. Los arqueólogos incluso han descubierto rastros de pigmento rojo y negro en las puntas de los huesos. El kit fue desenterrado por primera vez en 1985 y pese a ello, todavía no había sido estudiado, permaneciendo en un polvoriento almacén durante más de 32 años. Aaron Deter-Wolf, perteneciente a la División de Arqueología de Tennessee con un interés en los tatuajes antiguos, y Tanya Peres, zoonoteóloga de la Universidad Estatal de Florida, fueron los encargados de llevar a cabo la investigación.

En cuanto a la técnica tradicional, este paquete de herramientas obedece a un sencillo proceso: el pigmento de color se aplicaba al extremo afilado del hueso y se empleaba para penetrar en la capa de la dermis de la piel. «Con la llegada de los europeos, prácticamente todos los grupos de nativos americanos en Great Plains y Eastern Woodlands practicaban el tatuaje», afirmó Deter-Wolf a la revista Mental Floss. Los investigadores sospechan que se trata de una práctica muy arraigada en la historia de los nativos americanos.


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La historia de los tatuajes de nativos americanos abarca desde la costa este de Canadá hasta las islas hawaianas. El arte corporal a menudo se usaba para identificarse con una determinada tribu, aunque algunas comunidades también las usaban para prácticas espirituales y terapéuticas. Un relato de los colonos del siglo XVII afirma que un jefe iroqués, llamado Nero, tenía 60 tatuajes en su muslo, ya que cada uno simbolizaba a un enemigo que había matado.

Si nos remontamos a las primeras evidencias de tatuajes -aunque no se haya encontrado la herramienta-, en 1991 se encontró una momia neolítica dentro de un glaciar de los Alpes de Ötztal, con 57 tatuajes en la espalda. Esta momia es Ötzi, el hombre de hielo tirolés, y se trata de la momia natural humana más antigua de Europa.  Su antigüedad varía según distintos autores, pero oscila entre el 3370 y el 3100 a.C, equivaliendo a unos 5.000 años de antigüedad. También fueron encontradas momias tatuadas en la coste chilena, pertenecientes a la Cultura Chinchorro, y que consisten en un bigote delgado sobre el labio superior de un hombre adulto.

La finalidad de los tatuajes varía mucho según la cultura imperante: mientras que en el Antiguo Egipto -cuyo paradigma significativo es la momia de Amunet- se empleaban de forma simbólica y ritual, en la cultura grecolatina su destino era marcar o señalar a los criminales. En el caso del «Hombre de Hielo», las marcas podrían obedecer a un fin terapéutico, semejante a la acupuntura.

Uno de los descubrimientos más importantes data de 2006, cuando en la costa norte de Perú, se reveló el descubrimiento de una momia de 1.500 años de antigüedad en el Complejo Arqueológico El Brujo. Esta se conoce como la Dama de Cao, y sus brazos y manos lucen tatuajes con una variopinta flora y fauna, que abarca serpientes, arañas, cocodrilos, monos, leopardos, abejas, unicornios y mariposas.

Este artículo fue publicado en TICbeat por Andrea Núñez-Torrón Stock.

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