BMW reafirma su apuesta irrevocable por la automoción eléctrica con su nuevo BMW iX, un SUV 100% eléctrico pensado para que nunca más quieras volver al combustible. Comienza una nueva era.
Ha llegado el momento. Estamos en el punto de inflexión que tantos años llevamos esperando. El momento en el que los fabricantes están comprometidos al 100% con la conducción eléctrica, y ya tienen listos vehículos no contaminantes que no tienen nada que envidiar a los de combustible: ni en diseño, ni en potencia, ni en autonomía. Estamos en el inicio de una nueva era, y en el caso de BMW ese pionero que quiere cambiarlo todo se llama BMW iX.
La popular marca alemana estrena un espectacular SUV con dos motores eléctricos, tracción a las cuatro ruedas, 600 Kilómetros de autonomía, 500 CV de potencia, aceleración de 0 a 100 Km/h en menos de 5 segundos, y carga rápida de 120 Km en menos de 10 minutos.
Estos son los poderes del BMW iX, un vehículo pensado para todos los días: ya sea un trayecto en la ciudad, o un viaje largo de cientos de kilómetros:
Un diseño monolítico
La firma alemana ha trabajado mucho en una silueta que no deja indiferente a nadie, como ocurre con los diseños que transmiten personalidad.
El BMW iX parece construido de una sola pieza, con amplias superficies, una predilección por las líneas rectas, y un diseño minimalista que transmite sensación de poderío y robustez, sin perder la elegancia.
El diseño más llamativo está en el frontal, con la clásica parrilla BMW que se acentúa en vertical. La silueta lateral tiene forma rectangular, y las ruedas recuerdan a los primeros modelos de BMW. Su espectacular techo acristalado da mucho juego a la hora de ambientar el interior, y aumentar la sensación de amplitud.
Pero no todo el diseño exterior del vehículo está pensado para disfrutarse con la vista. Aspectos como los grandes difusores traseros, que mejoran la aerodinámica, o los bajos planos, contribuyen a aumentar la autonomía.
Tecnología tímida
A la hora de automatizar las funciones del vehículo, la marca alemana apuesta por lo que llama Shy Tech, es decir, mostrar la tecnología solo donde es necesario.
El interior del BMW iX presenta un diseño minimalista y relajante que no intenta abrumar a los pasajeros con botones, luces parpadeantes o tecnologías que saltan a la cara.
Seguro que te ha llamado la atención el volante. Es el primer volante hexagonal utilizado por BMW, y permite reservar un mayor espacio para el espectacular cuadro de mandos digital. Además lleva calefacción incorporada, para que no se te queden las manos frías en invierno.
Muchos botones han sido sustituidos por sensores táctiles, y otros, como la palanca de cambios, se han rediseñado por completo.
Estamos ante un vehículo de cinco plazas. Los tres asientos traseros cuentan con reposacabezas, calefacción y altavoces integrados.
La tecnología Shy Tech apuesta por la colocación de sensores y dispositivos que no están a la vista. Por ejemplo la parrilla BMW del frontal está totalmente cerrada, porque los vehículos eléctricos necesitan poca ventilación. Pero se usa para incluir una cámara, sensores de radar, sistema de limpieza y calefacción.
El BMW iX es compatible con la conexión 5G, para que te comuniques a la máxima velocidad mientras viajas.
Otros detalles curiosos son que el logo del capó se usa para rellenar el líquido del limpiaparabrisas, y la cámara de marcha atrás se oculta en la corona sobre la matrícula.
Tan potente como un deportivo
Durante años se ha achacado a los coches eléctricos su menor potencia o rendimiento, pero eso hace tiempo que es pasado.
El BMW iX es un SUV para el día a día, pero sus números son los de un potente deportivo: dos motores eléctricos, tracción a las cuatro ruedas, 500 CV de potencia, y aceleración de 0 a 100 Km/h en menos de 5 segundos. Con una autonomía de 600 Kilómetros, podrás hacer viajes largos con la misma tranquilidad que un vehículo de combustible.
Se puede configurar para una conducción deportiva, cómoda o con una autonomía optimizada. E incluye la función One-pedal-feeling para conducir con un solo pedal: al soltar el acelerador, también se activa un freno inteligente.
La carga eléctrica ya no es problema
El talón de Aquiles de los vehículos eléctricos ya solo es la recarga, pero incluso en este punto BMW lo ha reducido a la mínima expresión.
El BMW iX está equipado con carga rápida de hasta 200 kW. En un punto de carga rápida se puede recargar 120 Km de autonomía en menos de 10 minutos, y una recarga hasta el 80% en unos 40 minutos.
Si lo cargas desde casa con el sistema BMW Charging a 11 kW suministrado, cargarás la batería al 100% en 11 horas. Lo conectas cuando llegas a casa y te lo llevas 100% cargado cuando te marches al día siguiente.
Con más de 450.000 puntos de carga disponibles en todo el mundo, incluida la red Ionity, no tendrás problemas para recargar en cualquier lugar. Y cada día surgen nuevos puntos. La semana pasada Adif anunció la construcción de 400 nuevos puntos de carga rápida en España.
Aún quedan aspectos por revelar, como el nivel de autonomía y las funciones de inteligencia artificial que la firma alemana está implementando. Las irá mostrando en el año que queda antes de su lanzamiento, en noviembre de 2021.
Comienza una nueva era, la de los motores silenciosos y las cero emisiones, y estamos deseando vivirla. Ya falta muy poco…