Es la primera persona en 15 años que rechaza una beca de investigación de Google, ¿por qué? | Tecnología

Este profesor estadounidense ha decidido rechazar 60.000 dólares de subvención de Google, y su decisión ha sido aplaudida.

Google está en el punto de mira desde hace unos meses según un informe que revelaba las políticas que estaban imponiendo a sus trabajadores para dar una buena imagen forzada sobre su sistema de inteligencia artificial, y que provocó un efecto dominó en el que se sucedieron distintos despidos de personalidades importantes dentro de la empresa.

Y es que hay que entender lo anterior, para comprender el por qué Luke Stark ha decidido rechazar una beca de 60.000 dólares del gigante tecnológico hace unos días, una cantidad que le hubiera permitido finalizar las investigaciones en las que estaba sumergido, y que ha querido explicar tanto en redes sociales como en unas declaraciones a CNN Business.

Luke Stark es un ciudadano estadounidense que trabaja como profesor asistente de la Universidad de Western Ontario (Canadá), y que ha saltado a primera plana de la información hace escasos días cuando decidió rechazar una subvención de 60.000 dólares que Google le ofrecía para apoyar sus distintos proyectos de investigación sobre inteligencia artificial.


Desde que te levantas hasta que te acuestas, probablemente no pasen 15 minutos sin que uses algún producto o servicio de Google. Aunque te cueste creerlo, Google controla tu vida.

El pasado mes de noviembre Luke se postuló para el Google Research Scholar Award, un programa de financiamiento económico por aquellos profesores que inician su actividad y que adelantan investigaciones en campos relevantes para Google. En aquel momento Luke confiaba que la diversión de ética en inteligencia artificial de Google era realmente confiable y alineada a sus intereses, pero los tiempos han cambiado desde dicha postulación original.

Todo comenzó con el despido en diciembre pasado de la científica Timnit Gebru, especialista en el campo de la ética de la inteligencia artificial, quien había criticado lo que consideraba un sesgo en la visión de género en la compañía. Esto provocó que la empresa recibiera una carta con la firma de más de 1500 empleados y 2000 académicos en protesta por dicho despido.

Meses después se sucedió la destitución de la fundadora y codirectora del equipo de ética de inteligencia artificial de Google, Margaret Mitchell, quien igualmente criticó a la empresa tras la salida de su ex compañera.

El pasado 10 de marzo Luke Stark recibió un correo de la propia Google en el que anunciaba que había sido seleccionado para recibir 60.000 dólares de subvención destinados a la investigación que estaba realizando, relacionada con la inteligencia artificial para detectar emociones.


Las protestas de los empleados cuando descubrieron el verdadero objetivo de su trabajo, que hasta ese momento se había mantenido en secreto, obligaron a la compañía a replantearse su colaboración con el Departamento de Defensa de los Estados Unidos.

Tras consultarlo con sus socios, una semana después, Luke decidió responder a Google con otra carta en la que agradecía la empresa por su “voto de confianza”, pero señaló que no podía aceptar el premio “por solidaridad con las doctoras Timnit Gebru y Margaret Mitchell, sus compañeros de equipo y todos aquellos que han estado en situaciones similares”.

Un portavoz de Google consultado por CNN Business ha asegurado que Luke es la primera persona que rechaza una subvención del gigante tecnológico en los 15 años que la empresa lleva otorgando becas académicas y de investigación, que ya han alcanzado el número de 6500 concedidas.

Luke añade que “espero con interés la posibilidad de volver a colaborar con Google Research en el momento en que la organización y sus líderes hayan reflexionado sobre su decisión en este caso, hayan abordado los daños que hayan causado y se hayan comprometido, de palabra y de hecho, a fomentar investigación crítica y productos que apoyan la equidad y la justicia«, recoge CNN Business.

Deja un comentario