Madonna comparó la tutela legal que controla la vida de Britney Spears desde hace 13 años con la esclavitud y afirmó que “viola los derechos humanos”, en un mensaje de apoyo publicado este viernes en sus redes sociales.
La “reina del pop” subió a su historia (“stories”) de Instagram una fotografía en la que lleva una camiseta con el nombre de Britney Spears y exige que se ponga fin a la tutela, tal y como suplicó la cantante hace ya tres semanas ante los juzgados de Los Ángeles (EE.UU.).
“Devuelva a esta mujer su vida. ¡La esclavitud fue abolida hace mucho tiempo! Muerte al patriarcado codicioso que ha estado haciendo esto a las mujeres durante siglos. ¡Esto es una violación de derechos humanos! ¡Britney te vamos a sacar de la cárcel!”, escribió Madonna.
Madonna y Britney compartieron el trono de la música pop durante los años 90 y principios de los 2000. La primera era la “reina” del pop, la segunda la “princesa”.
Las dos colaboraron juntas en 2003 con “Me against the music” y su actuación al ritmo de “Like a Virgin” -emblema de Madonna- en los premios de la cadena MTV de ese año, con beso entre las dos incluido, es considerada uno de los momentos más recordados de la cultura pop.
Christina Aguilera, que también estuvo en esa actuación, ya mostró su apoyo a Britney días después de su declaración ante la justicia: “La convicción y desesperación de este pedido de libertad me llevan a creer que esta persona que una vez conocí ha estado viviendo sin la compasión o la decencia de quienes tienen su control”, afirmó.
Justin Timberlake (expareja de Britney), Paris Hilton, Elon Musk e Iggy Azalea son varios de los famosos que han apoyado públicamente a la cantante de “Toxic”.
La última reacción desde la intervención de Britney es la petición que Lynne Spears, la madre de Britney, ha formulado a la Corte Superior de Los Ángeles para que su hija pueda escoger a un abogado que defienda sus intereses.
De esta manera, la madre se pondría del lado de Britney al considerar que su situación actual es muy diferente del colapso de salud mental que sufrió en 2008, cuando comenzó la tutela legal con un carácter temporal en su inicio.
Sin embargo, su padre, Jamie Spears, es quien ejerce como tutor desde entonces y, por el momento, no ha dado ningún paso para cumplir con el deseo expresado por su hija de poner fin a este mecanismo legal.
Los padres de Britney están divorciados desde 2002, y aunque se reconciliaron durante un tiempo, llevan vidas separadas.
En los últimos días, varias personas involucradas en la vida de Britney han dimitido: Su anterior abogado, su representante artístico y el fondo que controlaba su patrimonio de 60 millones de dólares.