Es uno de esos botones que usamos menos de lo que deberíamos, porque tiene una función concreta. Pero muchas personas la desconocen.
Los vehículos modernos tienen docenas de botones diferentes, cada uno de ellos con una sofisticada función. Como hacemos con el ordenador o el móvil, al final solo utilizamos una mínima parte para el día a día, y nos olvidamos de los demás. Es lo que ocurre con el botón de recirculación del aire.
Es un botón con la silueta de un vehículo, y una flecha giratoria dentro. El propio nombre ya nos dice para qué sirve, pero no explica cómo lo hace, ni su función real.
Nuestro compañero Carlos Ferrer-Bonsoms explica en Business Insider su utilidad, y cuando la conozcas a fondo seguro que empiezas a usarlo más a menudo. Aunque no es un botón para abusar de él, como vamos a ver.
El botón de recirculación del aire, tal como su propio nombre indica, sirve para mover el aire que hay en el interior del vehículo. Pero es importante saber cómo funciona.
Tanto el aire acondicionado del coche para refrescar el ambiente, como la calefacción para calentarlo, funcionan tomando aire del exterior, que enfrían o calientan según se la función que uses. Esto hace que entre polvo y olores del exterior al interior del coche.
Al mismo tiempo, ese aire exterior estará muy frío en invierno y muy caliente en verano, así que el sistema de calefacción o el de aire acondicionado tardarán más en cumplir su función, porque necesitarán más tiempo para calentar esel aire exterior o enfriarlo, respectivamente.
El botón de recirculación del aire, además de mover el aire interior, realiza otra acción importante: cierra la entrada de aire exterior.
Por tanto, al usarlo evitamos que entre polvo si hace viento o rodamos por un camino de tierra, o malos olores.
Además al impedir la entrada de aire el aire acondicionado o la calefacción solo tienen que procesar el aire interior, así que tardan menos tiempo y consumen menos.
En resumen, si quieres evitar la entrada de polvo y malos olores, y acelerar su trabajo al usar la calefacción o el aire acondicionado, conviene pulsar el el botón de recirculación del aire antes de hacerlo.
Pero hay que tener cuidado y no abusar de él. Si lo empleas varias veces seguidas se puede crear condensación en las lunas del coche, provocar somnolencia e incluso reducir la concentración y reflejos del conductor.
¿Conocías su función completa y posibilidades?